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Los animales terrestres, como mamíferos, aves, anfibios y reptiles, respiran por los pulmones. Todos los organismos necesitan energía para todo el trabajo que realizan y se genera mediante la respiración, que requiere oxígeno. Los organismos toman oxígeno cuando inhalan, luego el aire llega a los pulmones, donde se absorbe oxígeno y se libera dióxido de carbono cuando los animales exhalan.
Mamíferos
Los pulmones de los mamíferos están formados por una gran cantidad de pequeñas estructuras en forma de saco conocidas como alvéolos. Cada alvéolo está rodeado de vasos sanguíneos y es en estas estructuras donde se produce el intercambio de gases. El aire ingresa al cuerpo de un mamífero a través de sus fosas nasales o por la boca, desde donde pasa a través de la tráquea para llegar a los pulmones. La tráquea se ramifica en dos bronquios, cada uno de los cuales llega a cada pulmón. Los bronquios se dividen en ramas más pequeñas, conocidas como bronquiolos. Cada bronquiolo transporta aire a un alvéolo. El aire entra y sale de los pulmones por el movimiento muscular del diafragma y, en parte, por la relajación y contracción del pecho. El aire inhalado y exhalado se mueve por el mismo camino, dentro y fuera de los pulmones, en mamíferos como humanos, perros y gatos.
Aves
Las aves necesitan mucha energía para volar. Respiran a través de los pulmones, pero el aire de sus pulmones fluye en una dirección, proporcionando un suministro constante de oxígeno. Tienen bolsas adicionales que extienden sus pulmones alrededor de sus cuerpos, pero a diferencia de los humanos, no tienen un diafragma que impulse el aire hacia adentro y hacia afuera de los pulmones. En cambio, esta función la realizan los músculos del cuerpo.
Anfibios
Los anfibios pueden vivir en tierra o en agua. Aunque usan más la piel para respirar, tienen pulmones y, cuando algunas especies son jóvenes, usan branquias para respirar. Los pulmones de los anfibios son muy simples, tanto que su respiración es a través de la piel, a través de la cual pasa el oxígeno a los vasos sanguíneos, justo debajo de la piel. Este tipo de respiración se llama cutánea.
Reptiles
A diferencia de los anfibios, los reptiles no tienen branquias durante ninguna etapa de su vida útil. Además, la piel seca y escamosa le impide respirar a través de ella. Por lo tanto, estos animales dependen completamente de sus pulmones para respirar. Los reptiles no tienen las membranas que tienen los mamíferos. En cambio, sus pulmones se inflan y desinflan a medida que la caja torácica se expande y contrae. Además, al igual que en los mamíferos, el aire entra y sale de los pulmones por el mismo camino.