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Los electroimanes son imanes alimentados por una corriente eléctrica. Ellos consisten en una bobina de hilo, que suele ser enrollada alrededor de un núcleo magnético hecho de hierro u otro material ferromagnético. El electroimán sólo emite un campo magnético cuando la corriente está encendida. Tal campo puede ser fortalecido, debilitado o incluso revertido variando la corriente que pasa por el dispositivo.
función
Los electroimanes se utilizan principalmente para mover cosas y almacenar información. Este uso se debe a su campo magnético, que repele físicamente el hierro y otros materiales. Al controlar cuidadosamente la corriente recibida por el imán, un ingeniero puede regular la fuerza ejercida por él y los movimientos del blanco. Se utilizan también para almacenar información, ya que muchos materiales absorben y almacenan campos magnéticos. El campo puede entonces ser leído por un lector magnético, cuando la información sea necesaria nuevamente. Muchos dispositivos, desde cintas de cassette a tarjetas de memoria, los utilizan de esta manera.
Tiipos
Uno de los tipos más simples de electroimanes se utiliza en un tipo de interruptor llamado relé. Cuando el dispositivo se enciende, activa un pequeño interruptor magnético, que cierra un circuito. De esta forma, una pequeña corriente puede encender y apagar otra mucho más grande.
Otro uso común es en actuadores, en los que efectivamente realizan un trabajo de movimiento. Por ejemplo, el electroimán puede mover la bobina del altavoz hacia adentro y hacia afuera. En un motor, es él que gira el rotor.
Un uso bien especializado, pero muy común, de esta tecnología es para alimentar el tubo de rayos catódicos de una televisión. Los electroimanes de alta potencia alimentan y conducen una cadena de electrones, haciendo que golpeen la pantalla de la televisión, para que brille.
Finalmente, también se utilizan para almacenar información. El disco duro de un ordenador tiene una placa especial, magnéticamente sensible, que almacena información conforme un electroimán está encendido y apagado.
tamaño
El tamaño de un electroimán depende de cuánta fuerza necesita ejercer. El electroimán de un pequeño relé, por ejemplo, tiene un centímetro de longitud o menos, pues todo lo que tiene que hacer es tirar de una pequeña tira de metal por una fracción de centímetro; todo el sistema es extremadamente pequeño. En la punta opuesta están las torres de radio, que necesitan ser lo suficientemente grandes para crear campos magnéticos que viajan por kilómetros. Entre los dos extremos están los imanes de las televisiones, que miden varios centímetros, y los motores de arranque de los coches, que necesitan producir mucha energía y pueden tener electroimanes de 15 cm o más.
importancia
Los electroimanes permiten que los ingenieros controlen fácilmente el movimiento, de una forma que sería imposible o muy cara sin ellos. En un relé, por ejemplo, la pequeña bobina magnética atrae un terminal de un pequeño interruptor metálico, cerrándolo. Hay una sola pieza móvil y no se utiliza ningún engranaje, haciendo que sea simple y fácil de fabricar. No hay otra forma fácil de hacer un interruptor automático. Los electroimanes también fueron la fuerza que condujo al desarrollo de los medios y comunicaciones modernas. Hasta hoy, alimentan muchos micrófonos, la mayoría de los televisores y casi todos los altavoces, además de los discos duros de las computadoras. Hasta las torres de transmisión de televisión y radio son básicamente grandes electroimanes.
advertencia
Muchos dispositivos electromagnéticos son muy sensibles a campos magnéticos. Usted puede fácilmente arruinar la pantalla de su televisor, barajando los datos de su tarjeta de crédito o borrar su disco duro si coloca un imán muy cerca de ellos. Mantenga los imanes lejos de todo lo que tenga la pantalla o la memoria. Algunos electroimanes también pueden ser peligrosos para las personas. Las televisiones usan electroimanes de altísima tensión para alimentar sus rayos catódicos. No abra una y mueva en su interior, a menos que realmente sepa lo que está haciendo.