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Es un problema común: mantienes ropa blanca limpia al final de la temporada y encuentras ropa manchada y amarillenta cuando abres el armario. Estas "manchas fantasma" son especialmente comunes en la ropa de bebé almacenada con vestigios discretos de leche en las fibras, pero pueden afectar cualquier tipo de ropa de color claro. No se preocupe, siempre hay formas de volverlos blancos de nuevo.
Blanqueadores de oxígeno
Los blanqueadores de oxígeno, que se venden con marcas como Vanish, pueden volver a tornar la ropa blanca amarillenta con el tratamiento adecuado. Los blanqueadores de oxígeno se activan con el calor, así que use el agua más caliente que pueda. Mezcle 1/2 taza de lejía oxigenada por cada cuatro litros de agua caliente en un bol y mezcle hasta que el polvo se disuelva. Agregue la ropa y mezcle para asegurarse de que todas las piezas estén saturadas. Remoja tu ropa de seis a ocho horas. Lavar a máquina normalmente. Cuelga la ropa para que se seque al sol o sécala en la secadora.
Bórax
El bórax, también conocido como borato de sodio, se ha utilizado durante mucho tiempo como quitamanchas y suavizante de telas. Para quitar las manchas amarillas de su ropa, agregue 1/2 taza de bórax a su lavadora y espere a que se llene de agua caliente. Abra la tapa para detener el ciclo tan pronto como se detenga el agua y agregue su ropa. Cierre la tapa, deje que la máquina funcione durante unos 30 segundos y luego abra la tapa. Deje la ropa en remojo durante 30 minutos. Después de eso, cierre la tapa nuevamente y deje que el ciclo de lavado continúe normalmente.
Sal y vinagre
Las manchas de sudor que alguna vez fueron invisibles pueden volverse amarillas durante los meses de almacenamiento y pueden ser particularmente difíciles de limpiar, especialmente si tienen olor. Remoje su ropa en agua fría con sal (use 1/2 taza de sal por cada cuatro litros de agua) para debilitar la mancha. Agrega dos tazas de vinagre de vino blanco por cada cuatro litros de agua y remoja tu ropa durante la noche. Lavar a máquina normalmente y secar en tendedero o secadora.
Prevención
La mejor manera de lidiar con el amarillamiento en la ropa almacenada es eliminar las manchas antes de guardarla. Siempre lave su ropa antes de guardarla, incluso si parece estar limpia y solo se ha usado una vez. Coloque los vestidos, blusas y camisetas en bolsas para ropa ventilada. Doble la ropa de bebé, las camisetas y la ropa interior limpias y guárdelas en cajas de plástico opacas que las protejan de la luz solar. Es posible que no pueda prevenir todas las manchas amarillas, pero puede evitar algunas de ellas con el tiempo.