Contenido
La contaminación del suelo se caracteriza por la acumulación continua de productos tóxicos, sales, materiales radiactivos, químicos o agentes patógenos, que dañan a los seres humanos y al medio ambiente. Es principalmente el resultado de las actividades humanas, incluida la aplicación de pesticidas como la atrazina, un herbicida muy común, y la generación de residuos industriales indeseables, como el arsénico. La contaminación altera la composición del suelo y crea un entorno patógeno que conduce a la propagación de enfermedades.
Cáncer
Los pesticidas, benceno, cromo y herbicidas son productos cancerígenos que pueden conducir al desarrollo de cáncer. La exposición prolongada al benceno es responsable de ciclos menstruales irregulares, leucemia y anemia, y puede ser fatal si hay niveles altos de esta sustancia. El benceno es una sustancia química líquida que se encuentra en el petróleo crudo, la gasolina y el humo del cigarrillo. Se utiliza en la síntesis química de sustancias e interfiere con la función celular. Disminuye la producción de glóbulos rojos, blancos y anticuerpos, comprometiendo así la inmunidad del cuerpo.
Enfermedad renal y hepática
Las personas desarrollan enfermedad renal cuando se exponen a suelo contaminado con plomo. Los contaminantes del suelo, como el mercurio y los ciclodienos, también aumentan la posibilidad de daño renal irreversible. Los ciclodienos y los PCB también causan intoxicación hepática. La situación es peor para las personas pobres que se ven obligadas por las circunstancias de la vida a vivir cerca de vertederos, industrias y vertederos, donde están expuestos a la contaminación del suelo a diario. Terminan con deficiencias inmunológicas, problemas renales y hepáticos, daño neurológico y problemas pulmonares.
Daño cerebral y nervioso
Los niños pueden estar expuestos a los efectos nocivos de la contaminación del suelo en lugares como parques infantiles y parques, donde se ha demostrado que la contaminación del suelo con plomo es la causa de problemas en el desarrollo neuromuscular y cerebral.
Malaria
El agua contaminada o las aguas residuales no tratadas pueden mezclarse con el suelo en áreas donde llueve mucho, como en los trópicos. El protozoo que causa la malaria y los mosquitos que lo hospedan prosperan en estas condiciones; resultando en una mayor propagación de ambos, lo que conduce a frecuentes brotes de malaria.
Cólera y disentería
La contaminación del suelo está fuertemente ligada a la contaminación del agua, porque cuando el suelo está contaminado, los contaminantes pasan a las aguas superficiales y subterráneas, lo que lleva a la contaminación del agua potable y al brote de enfermedades transmitidas a través de ella, como el cólera y la disentería. .