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Las enfermedades fúngicas son causadas por organismos del reino Fungi. Ellas causan síntomas que varían desde los minoritarios, en la piel, hasta tejidos más profundos, además de causar también septicemia, que son infecciones en la sangre que permiten la migración del hongo a otros lugares del cuerpo. Algunos tipos de hongos parasitan a los seres humanos y sólo causan enfermedades en personas con sistemas inmunes comprometidos. Los demás, por otro lado, siempre causan enfermedades cuando ocurre una infección.
Tipos de hongos
Los hongos existen en dos formas: mohos y levaduras. Las levaduras se encuentran comúnmente en el área vaginal y trabajan en conjunto con el sistema inmune para combatir las infecciones bacterianas. No se pueden ver a simple vista. Los mohos se visualizan como crecimientos crecientes que crean esporas que, a veces, se extienden y desarrollan otras manchas de moho. Muchas personas poseen reacciones alérgicas severas contra los mohos y sus esporas.
candidiasis
La candidiasis es comúnmente causada por la especie Candida albicans. Es parte de la flora natural de la piel, lo que ayuda a mantener la homeostasis de la flora bacteriana. Así, la Candida y las bacterias se controlan entre sí. Cuando las condiciones alteran el equilibrio de los organismos debido al uso de antibióticos, la Candida es capaz de sobreponer la homeostasis y causar enfermedades. Esta situación genera síntomas como "sapito", irritación genital en las mujeres y asado en la piel en contacto con el pañal en los bebés.
Transmisión de enfermedades fúngicas
Algunas infecciones fúngicas se transmiten de persona a persona. El hongo de los géneros Tricophyton, Microsporum y Epidermophyton causan enfermedades dermatológicas incluyendo la frieira, el pie de atleta y las infecciones en las uñas. Estas infecciones generalmente se llaman micose. Los hongos pasan a alimentarse de la piel humana y son transmisibles a otros individuos, a menudo a través de duchas.
Infecciones sistémicas
Las infecciones sistémicas causadas por los hongos son graves, especialmente si la septicemia se desarrolla. Las esporas inhaladas provenientes de mohos causan enfermedades respiratorias e incluso reacciones alérgicas severas, que llevarán a respuestas inflamatorias del sistema inmune, dificultando la respiración del paciente. Para las personas con un sistema inmune comprometido, la infección fúngica sigue creciendo, lo que hace necesario un tratamiento médico.
tratamiento
Las enfermedades dermatológicas se tratan con cremas antifúngicas tópicos. Para las infecciones severas, cuando las esporas son inhaladas, una prescripción de medicamentos intravenosos puede ser necesaria. Las enfermedades sistémicas pueden requerir medicación antifúngica durante más de un año para la recuperación completa. En casos aún más serios, una cirugía se realiza para quitar el hongo.