Contenido
- Regiones y condiciones de crecimiento
- orugas
- Ácaros arañazos
- Podredumbre de la raíz
- Enfermedad del cáncer
El ciprés italiano o ciprés común es un árbol perenne, de crecimiento rápido, que se presta bien a un proyecto arquitectónico. Es una planta muy diferente y susceptible a algunas enfermedades.
El ciprés italiano o ciprés común es un árbol perenne y de crecimiento rápido (Image Source / Photodisc / Getty Images)
Regiones y condiciones de crecimiento
El ciprés-italiano crece bien en climas cálidos y fríos, llegando a alcanzar una altura de 12 metros y una anchura de 1,5 metros en plena madurez. Se asemeja tanto a la exposición solar total como parcial, es tolerante a la sequía cuando ya se ha establecido y puede crecer en cualquier condición de suelo.
orugas
Aunque no es una enfermedad, puede ocurrir infestación de pequeñas larvas, similares a gusanos en el ciprés-italiano, que pueden alimentarse de las agujas del árbol, dejando las ramas desnudas. Hay tres maneras de controlar las orugas: naturalmente, con el uso de insectos como la avispa de la familia Vespid; de forma manual, retirando de los árboles las bolsas formadas por las larvas (parecen pequeños aglomerados de agujas); o usando un insecticida que contenga Bacillus thuringiensis.
Ácaros arañazos
Es difícil ver estos insectos a simple vista, pero la planta exhibirá señales con puntos marrones en las agujas. Si usted encuentra que hay ácaros en el árbol, tome una rama con puntos marrones en las agujas y bátala sobre una hoja de papel blanco. Si aparecen pintas marrones y estas se mueven, el árbol tiene ácaros arácnidos. Es difícil eliminarlos con un acaricida, porque los huevos no se ven afectados. Los mejores tratatán consisten en el uso de un spray de agua de alta potencia o de insectos, como la mariquita oscura conocida como "destructora de ácaros".
Podredumbre de la raíz
La podredumbre de la raíz es evidente por el follaje borroso, amarillo y marchito. Cuando las raíces están expuestas, marrones y polpudas al tacto, y la piel que las protege se suelta cuando está movida. La mejor defensa es preparar la tierra antes de la siembra, asegurándose de que tenga buen drenaje. Si el ciprés-italiano ya está establecido y comienza a dar señales de podredumbre de la raíz, se puede excavar una trinchera alrededor de la base de la planta para ayudar en el drenaje adecuado del agua.
Enfermedad del cáncer
El cáncer es la más grave y agresiva enfermedad que puede afectar al ciprés-italiano. El hongo que la causa es traído por el viento. Esta enfermedad creará lesiones que vierten la resina del árbol, circundando las ramas a medida que se extiende. Antes de morir, el ciprés asume un color amarillo pálido. No existe un tratamiento químico para el cáncer. Se puede podar muy por debajo del área afectada, pero esto sólo prolonga la vida del árbol. El mejor remedio es cortarlo y hacer el replanto.