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La regurgitación o el vómito de alimentos no digeridos en perros requiere atención inmediata del propietario del animal y, en algunos casos, un veterinario. El propietario debe examinar todo el contenido de alimentos dados al animal, además de determinar si sufrió o no de diarrea también. El episodio puede ser nada más que el resultado de ingestión exagerada de golosinas. Sin embargo, las heces sueltas, junto con el vómito de los pedazos de alimentos integrales, puede ser un signo de una enfermedad más grave.
Regurgitación y diarrea en su perro requiere atención (stray dog image by Cherry-Merry de Fotolia.com)
Señales de aflicción
Los perros regurgitan alimentos no digeridos y líquidos rápidamente y sin aviso. Ellos pueden hacer un ligero "eructo", como si algunas partículas de alimentos se fueran forzadas hacia atrás a través de sus gargantas, junto con una película de moco. Esta es la manera de la naturaleza de expulsar sustancias extrañas que los perros son notorios por ingestión, como objetos inanimados, plantas o cualquier cosa contaminada con productos químicos o bacterias. Si algo inusual está siendo escupido, será probablemente la causa del ansia de vómito.
Examen visual
Cuando un perro regurgita o vomita, un propietario debe comprobar el área anal de su perro para indicaciones de diarrea, parásitos o hinchazones. El dueño del perro también debe correr suavemente la mano hacia atrás y hacia adelante a través del abdomen de su animal para examinar cualquier sensibilidad o hinchazón que puede significar una obstrucción o la aflicción del estómago. Ella debe comprobar la boca para indicaciones de que el animal ha ingerido algo. Las piezas de tela, cuerda y hilos de línea son especialmente peligrosos para los perros.
Preservación de pruebas
La regurgitación generalmente ocurre poco después de un perro comer, por lo que el animal tratar de devorar todo lo que ha sido expulsado de su organismo. El propietario del animal debe limpiar el lío rápidamente para evitar esta situación, así como conservar una muestra para el veterinario si se necesita una visita.
Posibles causas
Un perro que vomita todo alimento puede estar pasando por una obstrucción abdominal grave. Cuando la diarrea y los vómitos están presentes, el perro puede estar reaccionando a analgésicos como el ibuprofeno, el naproxeno o la aspirina, lo que requiere una consulta de emergencia en la oficina del veterinario. La enfermedad de Addison, que afecta las glándulas suprarrenales del perro, también puede ser indicada cuando tanto vómito y diarrea están presentes. Al mismo tiempo, el perro podría simplemente estar recibiendo más de una tos o experimentando gas intestinal. El propietario puede administrar una pequeña cantidad de Pepto Bismol, si el perro no muestra más signos de enfermedad una hora después de regurgitar.
Visita al veterinario
El veterinario necesita una descripción minuciosa de los síntomas del animal. Los dueños de animales tienen que tener cuidado de no usar las palabras "regurgitación" y "vómito" de forma intercambiable. La Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad del Estado de Washington define la regurgitación como venida del esófago y los vómitos como venidos del estómago o intestino superior.
El veterinario necesita saber si el alimento no digerido o parcialmente digerido estaba involucrado y si hubo diarrea. Una descripción precisa lleva al diagnóstico correcto.