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Las lentes antirreflejos producen menos deslumbramiento, tanto para la persona que las lleva como para las personas que miran a quién las lleva. Son útiles en una variedad de situaciones, incluso cuando se conduce a altas horas de la noche. Desafortunadamente, se ensucian y empañan muy fácilmente y requieren un cuidado especial para evitar quitar el revestimiento antirreflectante. Mantener las gafas limpias es fácil, siempre que tenga cuidado de no frotarlas de forma incorrecta.
Paso 1
Rocíe el limpiador en el interior de las lentes.
Paso 2
Limpiar el paño de lado a lado, luego hacia arriba y hacia abajo, teniendo cuidado de limpiar las áreas particularmente borrosas o rayadas y la parte más cercana a la nariz. Después de la limpieza, las lentes deben secarse.
Paso 3
Rocíe el limpiador en el otro lado de la lente.
Paso 4
Limpie el otro lado de la lente, nuevamente teniendo cuidado de limpiar cualquier parte que esté turbia o rayada. Limpiar el paño solo hacia arriba y hacia abajo y de lado a lado, evitando frotar en círculos.