Cómo cultivar avena

Autor: Alice Brown
Fecha De Creación: 4 Mayo 2021
Fecha De Actualización: 16 Noviembre 2024
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Cómo cultivar avena - Vida
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Contenido

La avena se ha cultivado en todo el mundo durante miles de años y es un cultivo útil para los agricultores porque se utiliza como fuente de alimento para personas y animales, como vacas y caballos. Mide de 30 cm a 90 cm de altura, cada hoja de avena es larga y delgada, con un capullo difuso en la parte superior que contiene la semilla de la planta. La avena se desarrolla mejor a temperaturas moderadas.

Paso 1

Remoja las semillas de avena antes de plantar para ablandarlas y acelerar la germinación. Deben sumergirse en agua tibia durante 12 horas.

Paso 2

Plante las semillas bajo la luz solar directa. La planta necesita al menos 12 horas de exposición a la luz solar para florecer y crecer mucho. Crezca en campo abierto para obtener mejores resultados.

Paso 3

Evite plantar las semillas demasiado cerca unas de otras. De lo contrario, las plantas pueden desarrollar moho en sus tallos debido a la reducción de la circulación de aire. Plante unas dos semillas de avena por cada 6,5 ​​cm² de suelo.


Paso 4

Elimine las malas hierbas semanalmente, ya que absorben el agua y los nutrientes necesarios para la avena. Sácalos manualmente y deséchalos para evitar que se esparzan.

Paso 5

Plante semillas de avena a principios de la primavera, cuando la temperatura del suelo es más baja. Para la germinación, la temperatura ideal del suelo está entre 3 ºC y 5 ºC.

Paso 6

Riega la planta con regularidad. La avena requiere más agua que la mayoría de los cereales y prefiere suelos húmedos pero bien drenados. Riéguelo diariamente con un sistema de riego o aspersión.

Paso 7

Evite fertilizar la avena, ya que no necesitan fertilizantes para crecer y es probable que se dañen con el exceso de nitrógeno en el suelo si se fertilizan demasiado. Además, el alto nivel de nitrógeno en la avena puede ser tóxico para el ganado y otros animales.

Paso 8

Coseche la avena cuando la semilla al final de la hoja esté madura. Para comprobar si está maduro, pellizca con la uña. Si la semilla está demasiado rígida, significa que aún no está lista para la cosecha.