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La Cisaprida es una droga que se puede prescribir para el estreñimiento felino. Se retiró del mercado para el consumo humano en 2000, pero su uso no fue prohibido para el animal. Algunos veterinarios todavía prescriben este medicamento, pero el uso puede llevar a efectos secundarios graves, pudiendo incluso resultar en la muerte de la mascota.
Arritmias cardiacas
El uso de Cisaprida en gatos puede causar arritmias cardíacas o latidos irregulares del corazón. Esto puede resultar en el debilitamiento y la reducción de la función del músculo cardíaco que, a su vez, puede llevar a una insuficiencia cardíaca congestiva en su mascota. Algunas señales de arritmia incluyen debilidad y fiebre. Siente la nariz de su gato, si está caliente, eso indica que tiene fiebre y usted debe consultar a su veterinario.
Enfermedad renal
Los signos de enfermedad renal incluyen sed excesiva, pérdida de peso y vómito. Si su gato está tomando cisaprida y presenta alguno de estos síntomas, esto puede ser fatal para él. Si los síntomas persisten durante más de uno o dos días, lleve su mascota al veterinario tan pronto como sea posible.
Dolor de estómago y diarrea
Por fin, la Cisaprida puede causar dolores de estómago y diarrea en su gato. Esto puede llevar a la deshidratación o algo más serio si no se trata. Observe las heces de su animal para ver si contiene gusanos, lo que también puede causar diarrea. En ambos casos, encontrando gusanos o no, consulte a su veterinario.
