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Los jugadores de fútbol necesitan resistencia, velocidad, agilidad y fuerza al luchar contra el equipo adversario para mantener la posesión del balón. Los jugadores de ciertas posiciones necesitan habilidades específicas de defensa o ataque. Una mezcla de ejercicios ayuda a hacer de ti un jugador mejor.
resistencia
Los jugadores necesitan resistencia para durar todo el juego. Pero no hay que seguir al mismo ritmo durante todo el juego: alternan entre caminar, correr lento, rápido y piques. Por lo tanto, haga intervalos de ejercicios de baja y alta intensidad en el entrenamiento.
fuerza
La fuerza tiene un impacto profundo en la habilidad de un jugador de golpear la pelota y disputarla contra los adversarios. Desarrollar la fuerza en el tronco, el abdomen y las piernas es importante. Los ejercicios que usan el peso del cuerpo o los pesos libres deben concentrarse en ejercicios compuestos y funcionales. Se incluyen aquí flexiones, barras y flexión con banco; abdominales para el abdomen; y agachamientos, estiramientos y elevación con pantorrilla para las piernas.
Agilidad y velocidad
La velocidad de un jugador determina si será capaz de llegar hasta la bola primero, mientras que su agilidad afecta a lo bien que se maneja con la pelota después de llegar a ella. Aumentar la velocidad y mejorar la agilidad ayudan a un jugador a mejorar su rendimiento. Las carreras con tiempo en distancias específicas pueden ayudar a medir su velocidad. Compita contra su tiempo corriendo esa misma distancia hasta que la velocidad mejore. Añada un entrenamiento de agilidad corriendo alrededor de conos durante el entrenamiento de velocidad. Para aumentar la explosión, haga movimientos pesados, como agachamientos con salto y levantamiento de peso.
Posiciones específicas
Cada posición requiere un conjunto de habilidades diferentes, por lo que realizar ejercicios pliométricos concentrados en su necesidad le ayudará a entrenar en su posición específica.
Los arqueros deben entrenar saltos laterales, pues los necesitan para defender el gol. Este ejercicio se realiza en un solo pie, y saltando lo máximo posible hacia el lado opuesto, aterrizando solamente en el pie contrario al inicial, y luego saltando de vuelta. Comience pausando tres segundos entre los saltos y luego aumente la velocidad.
Los zagueros deben practicar flexiones explosivas, pues necesitan pelear para ganar posiciones y posesión de balón. Comience bajando el peso del propio cuerpo como en una flexión tradicional, pero en vez de extender sus brazos para finalizar el movimiento, empuje a sí mismo hasta que las manos salgan del suelo. Ponga suavemente y repita.
Los atacantes deben ser los más rápidos y ágiles, debiendo concentrarse en entrenamientos de agilidad como el salto T. En ese entrenamiento, los jugadores practican pequeños saltos de un lado a otro y hacia adelante y hacia atrás formando un T. Practique con los pies juntos y luego con un pie a la vez. Aumente la velocidad a medida que progrese durante este ejercicio.