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Enviar una carta rechazando una oferta de trabajo puede parecer innecesario, pero piense en el precioso tiempo que le tomó a alguien un proceso de entrevista y una oferta de trabajo que decidió no aceptar. Una carta que indique su negativa es profesional, cortés y libera al entrevistador para encontrar a alguien para su trabajo. Este tipo de carta también te permite mantener las puertas abiertas en el futuro si estás interesado en otras vacantes en la misma empresa más adelante.
Dirigiendo su carta
Envíe la carta a la persona que lo entrevistó. Esta es una forma educada que al mismo tiempo asegura que la información llegue a la persona que le ofreció el trabajo. Enviarlo a la empresa en general es de mal gusto y muestra una falta de aprecio por la persona que decidió darle la oportunidad.
Primer párrafo
Abra con un agradecimiento formal y genuino por la entrevista. Diga "Me gustaría agradecerle por poner su tiempo disponible en la entrevista para el puesto de gerente. Aunque realmente he apreciado nuestra conversación y la oportunidad de trabajo parece estar cerca de lo que estoy buscando, declino formalmente el puesto en la empresa". Las diversas formas de parafrasear este párrafo siempre deben incluir el rechazo de una manera cortés y lo más directa posible.
Segundo parrafo
No es necesario que explique por qué decidió rechazar la oferta de trabajo. Si decide dar una explicación, sea breve. Indique que recibió otra oferta que se adapta mejor a sus calificaciones. Evite entrar en detalles como "Recibí una oferta con mejor salario y beneficios". Esto no es necesario y la carta puede dar la impresión de que se está vendiendo por la mejor oferta. Evite que parezca que juega una empresa contra otra para obtener la mejor ventaja.
Cierre breve
Incluya un breve párrafo de cierre, nuevamente con agradecimiento y una demostración de su agradecimiento por la entrevista y la oportunidad. Nunca se sabe cuándo es posible que deba volver a acercarse a una empresa. Dejar una impresión positiva y cortés permite el contacto futuro para un nuevo puesto, sin temor a que el comportamiento anterior no fuera profesional, afectando oportunidades posteriores.