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Si sufre de mala circulación, significa que su sangre no fluye tan bien como debería, especialmente para sus pies y manos. La mala circulación puede causar varias enfermedades, como enfermedades cardíacas, presión arterial alta, venas varicosas, daño renal y problemas oculares. La mala circulación suele ocurrir porque los vasos sanguíneos están bloqueados por una placa o una acumulación de grasa, colesterol, calcio o restos celulares. Estos depósitos se adhieren a las paredes arteriales y crecen con el tiempo, reduciendo lentamente el flujo sanguíneo.
Mala circulacion
Síntomas
Los síntomas de mala circulación pueden incluir sensación de hormigueo en las manos y los pies, extremidades frías, calambres en las piernas, hinchazón en las piernas y los pies, mareos al estar de pie, coágulos de sangre, entumecimiento en las manos y los pies. y visión deteriorada. Si experimenta estos síntomas, debe buscar consejo médico. Su médico puede realizar pruebas como mediciones de la presión arterial en brazos y piernas, angiografía de las arterias de las piernas y ecografía Doppler para determinar si sus síntomas son causados por mala circulación.
Mala circulación y visión
La mala circulación puede afectar gravemente a sus ojos y visión. Puede causar efectos menos graves como círculos negros debajo de los ojos y áreas inflamadas de la piel alrededor de los ojos. La piel de esa parte de la cara es fina. Los capilares debajo de la piel alrededor de los ojos son vasos pequeños y, si su circulación es deficiente, los glóbulos rojos pueden acumularse allí. Cuando la sangre fluye hacia esta área, puede hacer que los frágiles vasos sanguíneos se rompan, causando parches parecidos a hematomas. El deterioro de la visión es una de las complicaciones más comunes de la mala circulación, que puede dañar el nervio óptico. El término médico para esto es neuritis óptica isquémica anterior, que se produce debido a un suministro de sangre insuficiente. El nervio óptico se atrofia gradualmente y finalmente muere. Esta afección puede afectar a personas de todas las edades, pero es más común en fumadores, ancianos y personas con diabetes. Puede tratarse con el uso prolongado de corticosteroides para prevenir daños mayores.
Mejorar la circulación
Puede mejorar su circulación y prevenir la acumulación de placa arterial manteniendo niveles saludables de colesterol y asegurándose de que su dieta diaria sea baja en grasas saturadas y alta en fibra. También puede probar varias terapias alternativas para promover una circulación saludable, que incluyen hidroterapia, masajes, reflexología, acupuntura y aromaterapia. Los remedios herbales útiles incluyen ajo, jengibre, ginkgo biloba y romero.