Contenido
Comer alimentos estropeados es la mayor causa de enfermedades causadas por la comida. Los culpables comunes como la leche y la carne ya no son los únicos que pueden estropear y hacer que se enfermen. Aunque tardan más tiempo, los alimentos a base de hongos, como las setas, también pueden estropear. Con un poco de información, es posible garantizar que las setas están frescas y buenas.
instrucciones
El champignon desarrolla un profundo sabor de carne cuando es cocido (Goodshoot / Goodshoot / Getty Images)-
Examine el envase para conocer la fecha de caducidad. En el caso de los hongos que respiran después de ser cosechados, los envases que disminuyen la circulación de aire ayudan a retrasar el proceso de validez, según Ramaswamy Anantheswaran, Ph.D, un profesor de alimentos y ciencia asociado de la Facultad de Ciencias de la Agricultura de la Universidad de Pensilvania . Plástico, sin embargo, no está garantizado. No compre ni consuma las setas con la fecha de caducidad vencida.
-
Olor a los champiñones. Setas vendidas individualmente no tendrán la fecha de caducidad impresa en ellos, y es posible usar la nariz para compensar por ello. Las setas frescas deben tener un aroma ligero de tierra. Un olor fuerte, agrio o de vinagre indica que el alimento está estropeado.
-
Limpiar los topos de las setas con un tocador de papel. Como la mayoría de los alimentos, agua en la superficie de las setas acelera el proceso para que estropeen. Se debe tomar un poco de tierra o una pequeña cantidad de humedad sobre la superficie de las setas. Un residuo viscoso significa que el hongo se ha estropeado.
-
Corte las setas por la mitad con un cuchillo sin sierra y los inspeccione. Setas buenas deben tener un color uniforme, con el interior un poco más oscuro que la cáscara. Las manchas verdes o azules indican hongos nocivos o crecimiento de bacterias.
consejos
- Cocinar las setas frescas en la salsa de tomate añade un gran sabor a un macarrón o pizza.
advertencia
- A menos que usted esté con un micólogo entrenado, nunca coma setas salvajes. Muchas especies peligrosas se parecen a tipos comestibles.
Qué necesitas
- Sus dedos
- Su nariz
- Toalla de papel
- Cuchillo sin sierra (opcional)