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El grafito es mucho más que una sustancia que se encuentra en un lápiz. Es un mineral conductor de electricidad y posee una variedad de aplicaciones, siendo utilizado como lubricante, revestimiento de frenos y hasta como una parte esencial en el proceso de fabricación de acero.
historia
A principios del s. XVI, había una gran mina de grafito cerca de Cumbria, en Inglaterra. Los habitantes utilizaban el grafito para marcar sus ovejas y era la única mina de grafito en que el mineral se encontraba en su estado sólido. En aquella época, química todavía era una ciencia emergente, y las personas que entraban en contacto con el grafito creían que era una especie de variación del plomo.
conductividad
El grafito es una sustancia única, siendo un no metal y aún un excelente conductor de calor y electricidad. Una de las aplicaciones más comunes para el grafito es en las pilas alcalinas, donde se utiliza para producir los cátodos de la célula.
lubricante
Conocido como un lubricante sólido, el grafito necesita vapor de agua para volverse aceitos. Sin embargo, se vuelve corrosivo cuando entra en contacto con el aluminio.
Revestimiento de frenos
Aunque el uso comercial del grafito está en baja en Estados Unidos, la aplicación de ese mineral explotó en China. Se utiliza para fabricar revestimientos de frenos, ya que la industria automotriz en China tiene una demanda muy alta, también existe la necesidad de grandes cantidades de grafito.
El futuro del grafito
Debido a sus características incomparables, el grafito posee un futuro brillante por delante donde se utilizará para la producción de moldes, así como parte fundamental de piezas mecánicas. Cuando se usa en las tuberías, este mineral disminuye o previene totalmente las erosiones químicas.