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La gente usa el sulfato de magnesio en baños, como ingrediente en enemas o para aliviar el estreñimiento. Sin embargo, debe ser utilizado con cautela. Las muertes relacionadas con el uso de la sustancia se han registrado desde 1943, de acuerdo con la página web Disabled World.
laxante
El uso de sulfato de magnesio como laxante es arriesgado. La ingestión de él puede causar una condición llamada de toxicidad de magnesio, que puede matar.
enemas
Los mismos riesgos de la ingestión de sulfato de magnesio se aplican a su utilización como ingrediente de enemas. Hasta principios de los años 1970, era común su uso en enemas para bebés, pero la práctica terminó después de haber sido asociada a muertes de bebés, según el sitio Disabled World.
Problemas de estómago
Si usted está sintiendo dolor de estómago, náuseas o si ha vomitado recientemente, el uso de sulfato de magnesio puede ser aún más arriesgado debido a la alta probabilidad de irritar más el tracto digestivo. Hay muchas otras alternativas para el alivio de problemas en el estómago y deben ser consideradas antes de recurrir al sulfato de magnesio.
drogas
El sulfato de magnesio puede reaccionar negativamente con ciertos medicamentos, como la doxiciclina, la minociclina o la penicilamina. Consulte al médico antes de usarlo para evitar cualquier riesgo de salud.
Mujeres en período de lactancia
Las mujeres embarazadas o amamantando, que quieran tomar sulfato de magnesio para estreñimiento, deben consultar al médico primero. El profesional puede recomendar otro tratamiento con laxantes para evitar cualquier riesgo de que la madre o el niño sean víctimas de la toxicidad de magnesio.