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La discriminación es un juicio negativo con respecto al género, la edad, la religión, la raza, la nacionalidad, la preferencia sexual o la altura. Es un problema importante que se puede encontrar en todo el mundo, dentro y fuera del lugar de trabajo. El gobierno de los Estados Unidos crea leyes que hacen que la discriminación sea ilegal. Los empleadores deben seguir una serie de leyes al contratar empleados. Sin embargo, incluso con las normas vigentes, muchas personas siguen siendo víctimas de discriminación. Hay muchas formas de acabar con la discriminación. Enseñar al personal y a los estudiantes sobre la discriminación a través de reuniones y clases es una forma muy poderosa de eliminarla.
Paso 1
Implementar políticas que prohíban la discriminación en el lugar de trabajo y áreas escolares. Esbozar puntos clave para combatir la discriminación, definirlos muy bien y difundirlos entre el personal y los estudiantes. Esas reglas que reducen la discriminación pueden incluir el despido, suspensión o expulsión de quienes usan lenguaje ofensivo, bromas racistas, maldiciones y gestos desagradables. Revele las reglas en el libro del estudiante o empleado y también en los folletos. Los manuales que contienen el código de conducta de la empresa o de la escuela deben distribuirse a cada empleado o estudiante al momento de la admisión. Coloque volantes en lugares populares de la escuela o el área de trabajo, como pasillos, tableros de anuncios, salas de descanso y baños. Divulgar en estos ámbitos que la discriminación, además de estar mal, no será tolerada.
Paso 2
Revele las consecuencias que tendrá la persona si se le declara culpable de discriminación, a través del manual de políticas. Entregue a los empleados una guía de políticas o un código de ética escolar para los estudiantes. Estas guías mostrarán lo que puede suceder si alguien es declarado culpable de cometer discriminación. Los empleados deben ser suspendidos sin paga o despedidos del empleo. Los estudiantes pueden ser suspendidos o expulsados de la escuela. Aplicar las reglas para acabar con la discriminación.
Paso 3
Presentar conferencias e invitar a ponentes a hablar sobre los efectos negativos, a corto y largo plazo, en el ámbito laboral o escolar. Programe reuniones anuales o mensuales para los empleados, con una duración anual de hasta una hora, para tratar diversas formas de discriminación, mientras que las mensuales deben ser más breves, recordando que no se tolera la discriminación. La celebración de reuniones mensuales largas no es palpable, por lo que algunas empresas tienen una "reunión matutina mensual" para recordar a los empleados las reglas del lugar de trabajo. Las escuelas pueden traer oradores que hayan sido discriminados. Pueden compartir con los estudiantes por qué la discriminación está mal y cómo se puede evitar. Evalúe el progreso de esta lucha. Verifique una disminución en el trabajo o quejas en la escuela sobre discriminación, a través del departamento de recursos humanos o la junta. Distribuya los informes después de las reuniones o conferencias para ver si ha habido un impacto positivo entre el personal y los estudiantes.
Paso 4
Súmate a la batalla contra la discriminación de muchas organizaciones que luchan juntas contra ella. Muchos sitios web y organizaciones aceptan participantes para ayudar en esta lucha. Súmate al que mejor se adapte a tu personalidad. Por ejemplo, si la discriminación racial es algo con lo que tiene que lidiar, únase a aquellos que tienen el mismo problema. Juntos, se pueden difundir conocimientos para ayudar a acabar con este problema. Estos grupos dan conferencias en bibliotecas públicas o escuelas para enseñar los efectos negativos de la discriminación. También se realizan eventos para demostrar que todos tienen derecho a la igualdad. Por ejemplo, los activistas por los derechos de las personas con discapacidad promueven el rugby en sillas de ruedas, donde dos equipos se enfrentan a pesar de que tienen una discapacidad. Los activistas por los derechos de los homosexuales y las lesbianas se reúnen para redactar cartas al Congreso, con la esperanza de crear leyes más estrictas para prevenir la discriminación contra ellos en el lugar de trabajo.