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Dependiendo del color, los ladrillos expuestos dentro de una casa pueden oscurecer una habitación, creando un aspecto aburrido y sin brillo que no coincide con los estilos de decoración modernos. Si aún te gusta la idea de tener paredes de ladrillo, pero prefieres una apariencia más clara, es posible iluminar la superficie aplicando pintura lavada. Los ladrillos se pueden aclarar con la aplicación de pintura diluida, iluminando la habitación en el proceso. Sin embargo, antes de comenzar, será necesario quitar el sellador existente de los ladrillos para exponer sus poros y permitir que la pintura se absorba.
Paso 1
Cubre la superficie de la pared de ladrillos con un solvente de pintura a base de cítricos para disolver el sellador que se les aplica. Pasar el producto en su sitio con una brocha, cuidando de aplicarlo en las líneas de mortero entre los ladrillos y en las superficies. Deje actuar el producto unos 10 minutos para que penetre en el sellador, y luego retírelo de la pared con un paño.
Paso 2
Limpie la pared de ladrillos con una solución de agua y jabón, agregando jabón en un balde de agua tibia, lo suficiente para hacer espuma. Use una esponja para aplicar la mezcla y limpie de arriba a abajo. Luego enjuague con agua limpia. Espere a que los ladrillos se sequen durante unas seis horas.
Paso 3
Diluir la pintura al agua en una bandeja hasta obtener una mezcla al 50%. Use pintura blanca para aclarar los ladrillos blancos o beige claro para aclarar los ladrillos marrones. Mezcle el agua en la pintura con un palillo de madera.
Paso 4
Toma un paño limpio y humedécelo con la mezcla de pintura. Exprime el exceso hasta que deje de gotear. Utiliza el paño con el producto para pintar los ladrillos, permitiendo que los poros de la pared absorban la pintura. Cúbralos uniformemente para obtener el mismo tono en la superficie. Aplique la pintura hasta obtener el color deseado y luego deje que la pared se seque durante la noche.
Paso 5
Aplique una nueva capa de sellador sobre los ladrillos para crear una protección resistente al agua para los ladrillos, evitando manchas o una nueva decoloración del color debido a la exposición a la luz. Deje que el sellador se seque durante 48 horas antes de tocar la pared.