Cómo aclarar el vino turbio

Autor: Sharon Miller
Fecha De Creación: 19 Enero 2021
Fecha De Actualización: 18 Mayo 2024
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Cómo aclarar el vino turbio - Vida
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Aunque el objetivo de todo enólogo casero es producir un vino cristalino claro y con mucho sabor, un resultado turbio puede arruinar la apariencia y, a veces, incluso el sabor del producto final. Un vino turbio puede ocurrir por varias razones, incluido el método de preparación de la uva, la fabricación incorrecta o la contaminación de equipos o materiales. Hay varias formas de aclarar un vino turbio antes de desecharlo que vale la pena probar. A continuación se muestran los pasos que los productores domésticos pueden tomar para clarificar un vino turbio.

Paso 1

Deje que el vino se aclare de forma natural, ya que este método no afecta el sabor ni el equilibrio químico. Llévelo a un ambiente más fresco, generalmente 12 ° C por debajo de la fermentación. El sedimento debe comenzar a asentarse, de lo contrario, agregue un poco de vino claro de una añada anterior para acelerar el proceso. Coloque el vino en recipientes de fermentación limpios una vez al mes durante seis meses hasta que esté claro. Algunos vinos pueden tardar hasta un año en aclararse de forma natural.


Paso 2

Use un agente clarificante, que se vende en tiendas de elaboración casera. Preparar la clarificación según las instrucciones del fabricante y añadir al vino. Deje reposar mientras se asienta el sedimento. Cuando el vino esté claro, colóquelo en botellas.

Paso 3

Prepara un clarificante casero. Batir una clara de huevo con 280 ml de vino blanco o tinto y una pizca de sal. Añadir al vino para aclarar hasta 38 litros.

Paso 4

Agrega dos o tres gotas de leche al vino blanco y deja que se disipe antes de guardarlo en botellas.

Paso 5

Disuelva un paquete de gelatina en un poco de agua caliente y agregue al vino tinto para ayudar a aclarar.

Paso 6

Coloque un filtro de papel de enólogo en un embudo y vierta el vino turbio a través de él. Aunque es posible mejorar la claridad del vino final, el sabor se verá afectado y, al abrirse el vino, existe el riesgo de oxidación. Por tanto, el filtrado debe considerarse como última opción.