Contenido
- Causas y síntomas
- Consuma alimentos ricos en lisina, vitamina C y B-12.
- Evite los alimentos ácidos y los alimentos con altos niveles de arginina.
- Otras formas de fomentar la curación
El hormigueo y la sensibilidad de la piel alrededor de la boca, la hinchazón, el enrojecimiento y la picazón son síntomas de la aparición de un herpes labial. Si bien no existe una cura específica, existen formas de minimizar el alcance y la gravedad de ciertos alimentos.
Causas y síntomas
El herpes labial es causado por el virus del herpes tipo 1. Cuando una persona contrae el virus, éste reside en el cuerpo de forma permanente, habitando las terminaciones nerviosas de la persona. Cuando las condiciones son adecuadas, una erupción, en forma de infección, conocida como herpes labial. El primer brote suele producir síntomas como inflamación de los ganglios linfáticos, sensación de malestar general y úlceras en la boca o los labios. Los siguientes casos se caracterizan por hormigueo y picazón en áreas alrededor de los labios y fosas nasales. Aparecen pequeñas burbujas. Se abrirán y filtrarán, luego se cerrarán y desaparecerán gradualmente.
Las heridas aparecen con mayor frecuencia como resultado del estrés físico o mental. Las enfermedades también ejercen una gran presión sobre el cuerpo, provocando la aparición de herpes labial. La exposición excesiva al sol también puede causar llagas. Debido a que el virus del herpes vive en las células nerviosas, detecta cambios en los niveles de estrés, la temperatura y el equilibrio del pH y sube a la superficie a lo largo de sus fibras nerviosas cuando las condiciones son adecuadas. Una vez en la superficie, se crea un nuevo virus mediante un proceso de replicación, que da como resultado una burbuja.
Consuma alimentos ricos en lisina, vitamina C y B-12.
Cuando tiene herpes labial, es importante prestar mucha atención y comer los tipos adecuados de alimentos que minimizarán la duración del brote.
La arginina es una proteína que funciona como un componente básico para crear nuevos virus del herpes. La lisina, en cambio, es una proteína que se ha considerado esencial en el proceso de curación y en la prevención de heridas al remplazar un poco de arginina en las células, contrarrestando así la replicación del virus del herpes. Los alimentos ricos en lisina incluyen el pescado, especialmente el salmón, la caballa y el atún, carnes como carne de res, pollo y cordero, y productos lácteos como yogur, queso, huevos y leche. Estos alimentos también contienen altos niveles de una vitamina llamada B-12, conocida por crear un ambiente inhóspito para que prospere el virus.
Una dieta llena de frutas y verduras frescas siempre es algo bueno, pero con el herpes labial, esta dieta se convierte en una decisión crucial. Las frutas como la manzana, la pera, el mango, la papaya y el aguacate, y las verduras, como la remolacha, el tomate, el brócoli, el apio y la papa, son ricas en lisina y también en vitamina C.Es vital para mantener un sistema inmunológico saludable, lo que previene Heridas y acelera el proceso de curación. Las frutas y verduras fibrosas también tienen la ventaja de proporcionar una forma de expulsar las toxinas del cuerpo.
Evite los alimentos ácidos y los alimentos con altos niveles de arginina.
La arginina ayuda al crecimiento del virus del herpes y, si es propenso a las llagas, es mejor limitar la ingesta de estos alimentos y eliminarlos por completo de su dieta cuando experimente un brote. Los alimentos ricos en arginina incluyen nueces, semillas, chocolate, café y otras bebidas con cafeína, gelatina, cereales, incluida la avena, trigo y arroz integral, lentejas y frijoles, moras y frutas cítricas como naranjas y mandarinas.
En buen estado de salud, su equilibrio de pH es de alrededor de 7,4, que es ligeramente alcalino. El estrés, las enfermedades y el exceso de sol harán que su cuerpo se mueva hacia el lado ácido. Es una buena idea limitar la ingesta de muchos alimentos ácidos durante un brote, mientras el cuerpo trabaja para volver a un equilibrio normal. Limite los alimentos, como cualquier cosa con vinagre. Los alimentos salados irritan las heridas y deben evitarse, al igual que los alimentos procesados, mientras el cuerpo se recupera.
Otras formas de fomentar la curación
Además de minimizar el estrés en el cuerpo y comer mucho pescado, carne, frutas y verduras, hay otras cosas que puede hacer para acelerar el proceso de curación. Aplicar hielo o una bola de algodón empapada en leche en el lugar aliviará el dolor y reducirá el tiempo de curación. Es una buena idea hacer esto cuando empiece a sentir el hormigueo, ya que ayudará a acelerar la curación desde el principio. También puede cubrir la herida con vaselina, que se cura rápidamente y ayuda a proteger el sitio de una infección secundaria. No aplique maquillaje en el área, ya que los químicos simplemente irritan la herida. También se ha descubierto que el regaliz ayuda a la curación: intente masticar regaliz (de verdad) o incluso espolvorearlo sobre la herida.