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Hay varias razones para que una persona pierda el pelo y uno de los culpables más comunes es el cáncer. Como el tratamiento para la enfermedad a menudo requiere quimioterapia, la persona tiene una oportunidad muy grande de perder el cabello.
importancia
La quimioterapia provoca la pérdida de cabello porque el tratamiento tiene como objetivo las células que crecen rápidamente, incluyendo las raíces del cuero cabelludo. Algunas personas pueden incluso sufrir pérdida de pelos en todo el cuerpo, incluyendo en la región pubiana, cejas y pestañas. Dependiendo de la dosis de quimioterapia, es posible que el pelo quede rallado o ocurra la calvicie completa.
efectos
El pelo de un paciente de quimioterapia generalmente comienza a caer de una a dos semanas después del tratamiento, gradualmente o en gran cantidad. La mayoría de los pacientes pueden observar la pérdida de los hilos a través de su cepillo de pelo, fregadero, ducha y almohada. Sin embargo, la mayoría de la gente pierde la mitad de los hilos antes de que sea visible para los demás.
prevención
De acuerdo con el sitio Mayo Clinic, la hipotermia del cuero cabelludo es un tratamiento que ayuda a evitar la pérdida de cabello durante la quimioterapia. Este tratamiento funciona aplicando compresas de hielo en la cabeza para disminuir el flujo de sangre en el cuero cabelludo. Al disminuir el flujo, la quimioterapia es menos susceptible a afectar los folículos capilares.
tratamientos
Hay también varios medicamentos disponibles para ayudar en el crecimiento del cabello después de la quimioterapia. Uno de los más comunes es Rogaine; pero Nioxin, Tricomin y Revivogen son todos desarrollados para combatir la pérdida de los hilos en hombres y mujeres.
consideraciones
Según el American Hair Loss Counsel, algunas personas notan que la textura y el color son diferentes cuando el cabello empieza a crecer de nuevo. Esta diferenciación se produce porque las células de pigmentación han cambiado. Cuando vuelven a la normalidad el color original del cabello muchas veces vuelve. En la mayoría de los casos, la pérdida de cabello inducida por la quimioterapia es temporal. Los hilos normalmente crecen medio centímetro por mes, comenzando unas seis semanas después del tratamiento. La mayoría de la gente puede esperar de seis meses a un año, después del tratamiento contra el cáncer, para tener la cabeza llena de nuevo.