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La glándula tiroide queda en el cuello. Controla la producción de hormonas responsables del metabolismo. La eliminación de la tiroides se realiza en casos de cáncer o hiperactividad no sensible al tratamiento. La pérdida de peso puede ser muy difícil después de una tiroidectomía debido al impacto sobre el metabolismo y sobre la capacidad de quemar calorías.
Pérdida de peso para pacientes que pasaron por la tiroidectomía (Duncan Smith / Stockbyte / Getty Images)
Reposición hormonal
Después de una cirugía de eliminación de la tiroides, no producirá más la hormona tiroidea. Esta condición se llama hipotiroidismo y algunas personas sufren con esto a pesar de tener una glándula intacta. La condición puede resultar en una ganancia de peso inexplicable, entre otros síntomas.
La reposición hormonal es una de las partes de la recuperación postoperatoria y puede ayudar con el cuadro de ganancia de peso después de la tiroidectomía. La hormona tiroidea es responsable de la habilidad corporal de quemar calorías y es una parte esencial de la capacidad de perder peso. Hable acerca de la terapia con su médico antes de la cirugía.
Varios factores determinar si usted perderá peso con la terapia de reemplazo después de la cirugía. Monitoree el adelgazamiento para definir si está siendo tratado apropiadamente. Es posible que la cantidad de hormonas utilizadas no sea suficiente o que no estén absorbidas adecuadamente. Los suplementos de calcio y otros tipos pueden interferir en la absorción de los compuestos. Si tiene dificultad para perder peso con la terapia, discuta con su médico lo que puede estar obstaculizando el proceso.
Dieta balanceada
Una dieta balanceada y de baja caloría junto a la terapia de reemplazo hormonal es necesaria para la pérdida de peso. Tomar hormonas que ayudar al metabolismo no significa que se puede descuidar la dieta.
Una dieta equilibrada incluye 30% de calorías de proteínas, 30% de grasas sanas y 40% de carbohidratos complejos. Un régimen de proteínas magras, como el pescado y el pollo, junto con las grasas sanas, la aceituna y el aceite de canola, es la mejor opción para adelgazar después de la tiroidectomía. Los carbohidratos complejos están presentes en frutas y vegetales, además de granos integrales. Evite las comidas procesadas y los productos que contienen la harina blanca para una alimentación mejor.
Puede ser más difícil perder peso después de la tiroidectomía, pero una dieta balanceada es un componente vital.
ejercicio
Tenga como meta 30 minutos de ejercicios diarios para la pérdida de peso, como caminar o correr. Si hay dificultad con los 30 minutos, haga cuanto pueda y vaya aumentando gradualmente el tiempo hasta llegar al objetivo. El ejercicio, junto con la reposición hormonal, ayudará a quemar las calorías consumidas en la dieta balanceada.