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Las alfombras que resbalan pueden ser peligrosas. Una de las soluciones más comunes es comprar gomas, pero son normalmente caras. Hay varias otras estrategias que usted puede utilizar para guardar sus alfombras en su lugar sin gastar mucho.
Haga su propio trabajo
La mayoría de los apoyos de alfombra se hacen de fieltro. Seleccione un tejido fino con una superficie de felpa. Corte el fieltro para combinar la dimensión de la alfombra, si es posible 2 cm más pequeño en todos los bordes para que no quede visible.
Si su piso es encarpado, simplemente añada una capa de fieltro debajo y enrolle su alfombra directamente sobre él. Si tiene piso de madera o tacos, que tienden a causar más deslizamientos, sujetar el fieltro en la alfombra, usando pegamento de tejido o cinta doble cara.
Otra opción para pisos duros que proporciona más resistencia es comprar una sábana de goma en una tienda y cortar para combinar con la alfombra. Similar al fieltro, usted puede simplemente poner el caucho y sostenerlo usando el adhesivo para una fijación permanente.
Ambas opciones son mucho más baratas que un apoyo industrializado.
Cinta de alfombra
Si usted tiene tacos o piso de madera, compre un rodillo de cinta para alfombra doble cara especialmente para esa aplicación. Esta cinta tiene un adhesivo a ambos lados y normalmente es ligeramente acolchada.
Aplique la cinta en la parte posterior de la alfombra, enfocando los bordes y las esquinas. Intente hacer formas de X con la cinta en el medio de la alfombra para evitar que haga burbujas. Coloque la alfombra en su lugar cuidadosamente. Aplique un poco de presión para que la cinta se adhiera a la superficie del suelo. Este tipo de cinta se puede utilizar en algunos tipos de alfombra. Pruebe primero en un área oscura para el caso de arrancar las fibras de la alfombra.
Otras soluciones
Usted puede tener algunos materiales en su casa para evitar que la alfombra se deslice. Para pisos duros, calafetador de bañera es rápido y fácil para adherir una alfombra al suelo. Aplique tiras en la parte posterior de la alfombra y colóquela en el suelo para secar. El calafateador no daña el piso y se puede quitar y lavar.
Otra opción es usar goma para mantener la alfombra en su lugar. Simplemente pegue una a cada esquina de su alfombra, en una alfombra redonda, a cierta distancia de la anterior.
A menos que planifique eventualmente sustituir su piso, no pegue la alfombra directamente en él.