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Una persona sufre un colapso nervioso cuando alcanza el límite de las fuerzas físicas y emocionales al exponerse a presiones y situaciones de estrés difíciles de lidiar.A diferencia de un cuadro de estrés que muchas personas puedan experimentar, el colapso previene al individuo de funcionar normalmente. Las razones por las que surge un colapso son propias de las circunstancias vividas, y los síntomas presentados varían de persona a persona.
Causas del colapso nervioso
El médico estadounidense Dr. Cosmo Hallstron, psiquiatra y psicofarmacólogo clínico, identifica la interacción de tres factores interconectados causantes del colapso nervioso: predisposición genética, resistencia emocional y una situación desencadenante. Un estudio de la Universidad de Indiana descubrió que más del 25% de los estadounidenses sienten en algún momento estar en la inminencia de un colapso, en general causado por cuestiones de relación o estrés de ser un padre o una madre separada. Otra razón por la que ocurre un colapso es la culminación de pequeñas presiones por un período de tiempo. De acuerdo con el Dr. Phillip Timms, psiquiatra de la fundación South London y Mudsley Trust, en Inglaterra, el colapso es el producto de una acumulación emocional generada por la falta de gestión de episodios depresivos.
Síntomas conductuales
La forma en que alguien lidia con el estrés y las presiones del día a día suele manifestarse por el comportamiento. Las señales concretas de que alguien tiene problemas emocionales incluyen llanto inesperado, hablar poco, dificultades de concentración o simplemente comportamiento diferente de lo usual. En opinión de expertos como el Dr. Daniel Flavin, de la Mayo Clinic, olvidarse de compromisos, si ausentarse del empleo con atestados por mucho tiempo y evitar compromisos sociales también son indicadores de un posible colapso nervioso.
Síntomas emocionales
La sensación de incompetencia y la incapacidad de cumplir tareas son generalmente factores que contribuyen a los colapsos nerviosos, o incluso a otros síntomas emocionales comunes. Para Elly Prior, psicólogo reconocido y con experiencia de más de 20 años, alguien que está sufriendo un colapso puede sentirse tomado por un sentimiento de pánico, irritabilidad, miedo o rabia. Además, no es raro, en personas colapsadas, sentirse abandonados por personas cercanas y perder el sentido de satisfacción con cosas que normalmente darían placer.
Síntomas físicos
La mayoría de las personas que sufren un colapso nervioso también presentan síntomas físicos, como insomnio, pérdida de apetito, problemas estomacales, temblor, sudor, arritmia cardiaca y mareo. Los problemas preexistentes como la migraña, eczema, úlcera y cólicos intestinales se pueden potenciar en un cuadro de colapso nervioso.
