Contenido
- Lo que era
- Origen legendario
- Motivos para el amarre de pies en los siglos siguientes
- El final del amarre de pies
Muchas culturas a lo largo de la historia del mundo mantuvieron prácticas inexplicables para el mundo moderno o para otras culturas. Algunas son sólo "extrañas" o pequeñas diferencias, pero en ciertos casos, dejan de ser peculiaridades para convertirse en actos perturbadores. Una de las prácticas culturales más incómodas a nuestros ojos es el amarre de los pies, que ocurría en China. Ella es incómoda para el mundo moderno, pues involucra el acto de atrofiar partes del cuerpo de niños e intencionalmente causar dolor en personas de todo un género.
Lo que era
La práctica china de atar los pies redujo el tamaño de los pies para que mediesen entre 7 cm y 10 cm. En razón de la dificultad de realizar este procedimiento en mujeres mayores, el proceso empezaba aún en la infancia, generalmente cuando la niña tenía entre 4 y 7 años de edad. La madre comenzaba el proceso atando un vendaje de 10 m de largo por 5 cm de ancho alrededor del pie, de forma que los tacos se inclinaban hacia la planta del pie. Forzar la aproximación entre el talón y el dedo gordo hacía el arco del pie más pronunciado. El vendaje se apretó diariamente hasta que se llegara al tamaño deseado, lo que llevaba cerca de dos años.
Origen legendario
No se sabe la fecha exacta del inicio de esta tradición ni lo que la motivó. Los estudiantes creen que la práctica comenzó en el siglo 7, con la dinastía T'ang. Diferentes leyendas ofrecen diferentes respuestas a la pregunta de cómo comenzó esta tradición. Hay una leyenda que cuenta que una de las concubinas del emperador tenía pies pequeños y graciosos y entonces tener pies pequeños entró de moda. Otra leyenda afirma que el emperador ordenó que una concubina atase sus pies porque él creía hermoso ver los pies atados con seda. Conforme a una tercera leyenda, la esposa del emperador tenía los pies torcidos y su esposo ordenó que todas las mujeres amarrar sus pies, para que se parecían con los suyos, creando así un patrón de belleza.
Motivos para el amarre de pies en los siglos siguientes
La tradición de atar los pies era, inicialmente, restringida a la Corte Imperial. Sin embargo, la Corte servía como modelo de lo que era apropiado en el país y con el paso de los siglos esa práctica se extendió. Una de las posibles explicaciones para ello es que la práctica evitaba que las mujeres huir de casa o escaparse de una paliza. Otro motivo era de cuño erótico. Algunos hombres encontraban el pie amarrado erótico y sexualmente excitante. Además, se decía que atar los pies hacía el sexo mejor. Por último, los pies atados eran un símbolo de status en China. Las madres que buscaban una esposa para sus hijos insistían que sólo aquellas con los pies atados eran una buena combinación para su brote. Así, las mujeres ata los pies de sus hijas, para garantizar un buen matrimonio para ellas.
El final del amarre de pies
La dinastía Manchu intentó prohibir esta práctica cuando alcanzó el poder en 1644, pero falló. Los Manchu no dieron continuidad a la tradición, a diferencia del resto de los chinos. A finales del siglo XIX comenzaron a surgir grupos que combatían esa tradición. A pesar de la prohibición gubernamental de 1912, muchas familias continuaron atando los pies de las niñas. Hoy, el amarre de pies es una reliquia del pasado chino.Sin embargo, un pasado no tan distante así, pues en 2011 muchas mujeres que tuvieron los pies atrofiados durante la infancia todavía estaban vivas.