¿Qué son los quistes sebáceos caninos?

Autor: Sharon Miller
Fecha De Creación: 19 Enero 2021
Fecha De Actualización: 23 Noviembre 2024
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¿Qué son los quistes sebáceos caninos? - Salud
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Contenido

Los quistes sebáceos caninos son nódulos grasos debajo de la piel del perro. La mayoría de las veces son inofensivas o benignas. Es muy raro que un quiste sebáceo sea maligno, pero no es imposible. Lo mejor que puedes hacer es observar al animal y, si notas una nueva hinchazón o bulto, llévalo al veterinario para que lo examine. Comprender qué son los quistes sebáceos, o lipomas, facilita el seguimiento del perro.

Perros con mayor riesgo

Los quistes sebáceos aparecen con más frecuencia en perros de mediana edad y mayores, ya que son menos activos que los más jóvenes. Las hembras corren más riesgo que los machos, al igual que los animales con sobrepeso u obesidad. Las razas más susceptibles incluyen Doberman Pinscher, Schnauzer miniatura, Labrador Retriever y razas mixtas, pero los lipomas no se consideran un defecto genético.


Ubicación

Los lipomas se pueden encontrar en cualquier parte del cuerpo del perro, pero suelen aparecer con mayor frecuencia en el pecho, estómago o vientre y muslos, debajo de la piel; a veces pueden arraigar entre el músculo y el tejido conectivo. Por lo general, crecen lentamente y no se extienden por todo el cuerpo. Revise estas áreas cada semana y, si nota un nuevo bulto, pídale a su veterinario que lo investigue y asegúrese de que sea un tumor graso y no una masa maligna.

Caracteristicas

Los quistes sebáceos suelen ser nódulos redondos que se mueven debajo de la piel y tienen bordes lisos. Su perro no perderá pelo del área alrededor del quiste ni sentirá dolor si lo toca; la piel no se irritará ni enrojecerá. El tamaño del quiste no es uniforme y puede ser bastante pequeño o del tamaño de una bola de boliche.

Tratamiento

Los quistes sebáceos caninos no son dolorosos ni ponen en peligro la vida del perro, por lo que los veterinarios prefieren dejarlos en paz. Debido a los riesgos y complicaciones de las cirugías, no vale la pena realizarlas solo para la extirpación del nódulo. Sin embargo, si su mascota será anestesiada y se someterá a un procedimiento quirúrgico por algún otro motivo, el veterinario puede aprovechar y extirpar el lipoma. Generalmente, los dueños controlan los quistes todos los meses, por lo que si hay un cambio repentino en su apariencia, si comienzan a sangrar o aumentar de tamaño demasiado para afectar los movimientos del perro, su veterinario puede optar por eliminarlos.