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Los cachorros nacen con los ojos cerrados que no se abren durante 12 a 15 días y pueden verse perjudicados por la luz brillante. Las retinas permanecen inmaduras hasta la edad de aproximadamente 3 semanas. El exceso de luz también puede provocar ansiedad en la madre, haciéndola sentir expuesta y vulnerable al peligro.
Demasiada luz puede ser dañina
Las lámparas proporcionan calor
Durante la primera semana, la temperatura en la caja de los cachorros debe rondar los 32 ºC, disminuyendo gradualmente durante cuatro semanas hasta los 23 ºC. Algunos expertos abogan por colocar una lámpara de calefacción cerca para mayor calidez. Una sábana o toalla sobre la caja puede bloquear el exceso de luz.
Conclusión
Los veterinarios están de acuerdo en que la luz brillante puede dañar los ojos de los cachorros recién nacidos, pero también en que deben mantenerse calientes. Resuelve el problema con una bolsa de agua caliente, pero si usas una lámpara, haz agujeros en un trozo de papel de aluminio para cubrir la abertura y bloquear el exceso de luz.