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Las bombas de bicicleta manuales son básicamente máquinas de pistones y cilindros que comprimen el aire y lo introducen en una cámara de aire. Las bombas de piso, bastidor y de pie tienen las mismas partes primarias que son propensas a fallar: las mangueras y los accesorios relacionados y el sello en el extremo del vástago del pistón, conocido como cuero.
Paso 1
Verifique que no haya fugas en la manguera sosteniendo su dedo contra la conexión de la válvula en su extremo y operando la bomba una o dos veces. Si la manguera o los accesorios están dañados, el aire silbará en el racor de la válvula (cabezal), en la base de la bomba o a través de la propia manguera.
Paso 2
Reemplace las mangueras rotas o agrietadas por una nueva. Deben soportar adecuadamente la alta presión.
Paso 3
Repare una cabeza con fugas aflojando la tuerca y reemplazando el sello. Si tiene una fuga cuando se conecta a la manguera, reemplace el conector con una abrazadera ajustable.
Paso 4
Apriete un accesorio en el extremo de la manguera de la bomba, si tiene una fuga, donde se atornilla a la base de la bomba. Si eso no resuelve el problema, reemplácelo con una nueva abrazadera.
Paso 5
Repare un pistón defectuoso quitando el conjunto de la varilla del cilindro de la bomba. Si está agrietado o perforado, reemplácelo. Si parece estar seco o deformado, lubríquelo generosamente con una grasa ligera o aceite pesado.