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Los productos de cuero barnizado, como zapatos y bolsos, vuelven ocasionalmente a la moda. El cuero es brillante y atractivo y se puede usar con atuendos semiformales. Estos productos suelen tener colores vivos, debido al acabado brillante que hace que el color resalte. Este tipo de cuero es uno de los más fáciles de cuidar, pero a veces puede volverse pegajoso. Antes de contratar un costoso servicio de limpieza o desechar la pieza, intente repararla con un producto que probablemente pueda tener en casa.
Paso 1
Limpie la pieza con un paño suave y limpio para eliminar el polvo.
Paso 2
Humedece un paño suave con vinagre. Frote la zona pegajosa del cuero con vinagre hasta eliminar toda la viscosidad.
Paso 3
Pula el área limpia con un paño limpio y suave.
Paso 4
Humedezca un paño suave y limpio con trementina. Frote el producto en toda la pieza, para mantener el cuero brillante y protegerlo de la sequedad y el agrietamiento.