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Los perros con fiebre tienen algunos de los mismos síntomas que los humanos con fiebre. Al igual que en los humanos, la fiebre canina es un mecanismo interno que sirve de protección frente a infecciones o enfermedades. Para calmar la fiebre y prevenir un mayor daño interno, es posible darle al perro una tableta de paracetamol. Sin embargo, es pertinente tomar las medidas adecuadas para evitar intoxicaciones accidentales.
Paso 1
Mide la temperatura de tu perro para asegurarte de que tenga fiebre. A diferencia de los humanos, la temperatura de un perro se obtiene a través del recto. Tome un termómetro limpio y colóquelo en el recto del perro. Si su termómetro es digital, la lectura se tomará automáticamente. Si es un termómetro manual, espere dos minutos para obtener una lectura más precisa. La temperatura normal para los perros está entre 37 ºC y 39 ºC, cualquier temperatura más alta se considera fiebre.
Paso 2
Administre la dosis adecuada de paracetamol. Según el sitio web Petplace.com, en la dosis adecuada, el paracetamol no es tóxico para los perros. Sin embargo, si se administra en cantidades incorrectas, puede ser fatal. Por tanto, calcule la dosis adecuada antes de administrar. Los perros deben recibir de 5 a 10 mg de Tylenol cada 450 g.
Paso 3
Coloque la tableta mezclada con comida o en bocadillos. Pon paracetamol con queso, mantequilla de maní o la galleta favorita de tu perro para enmascarar el sabor. Los perros no suelen consumir pastillas por sí solos, por lo que disfrazarlas con comida facilitará esta tarea, especialmente si la fiebre de tu perro ha provocado una falta de interés por comer.
Paso 4
Controle la temperatura y el comportamiento de su perro. Si el paracetamol está surtiendo efecto, el comportamiento de su perro debería cambiar. El letargo disminuirá y la energía se hará más evidente. Verifique la temperatura de su perro con frecuencia y compárela con su comportamiento para ver si el medicamento está funcionando.