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A lo largo de la historia, el oro ha sido considerado el metal más precioso de todos y uno de sus principales usos fue la creación de joyas y objetos decorativos. La medida en quilates se refiere a la pureza del oro. En joyería, 10 quilates son los menos puros (y los más densos), mientras que los de 24 quilates son los más suaves y casi puros. A veces, la pureza está marcada en la joya, pero unas pocas pruebas simples pueden resolver cualquier duda.
Paso 1
Descubra a qué se refiere un quilate. Dado que el oro es un metal blando, se mezcla con otros metales para mejorar su durabilidad y dureza. Cuando se forma esta aleación, la medida en quilates se usa para indicar la cantidad de oro presente. La medida va de 10 a 24, siendo el último oro puro. Los artículos menos puros se llaman chapados en oro.
Paso 2
Busque marcas en la pieza. Por lo general, las joyas de oro están marcadas con un número y la letra K, que marcan la pureza en quilates. Entonces, 10K es un oro de 10 quilates y 24K es un oro de 24 quilates. Esta marca se encuentra generalmente en el cierre de collares y pulseras, en el interior de un anillo y en la parte posterior de un pendiente.
Paso 3
Utilice un kit de prueba de oro. Estos kits utilizan ácidos para determinar la pureza del oro. Por lo general, tienen botellas separadas para 10K, 14K, 18K, 22K y 24K. Para usarlo, raspe la joya en la piedra del kit. Haga esto en un área protegida, como el interior de un broche, ya que dañará la pieza. La prueba tendrá las instrucciones exactas de uso. El tiempo necesario para que el ácido disuelva el oro es un indicador de su pureza.