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Debido al largo intervalo entre la concepción y el nacimiento, los propietarios de caballos pueden no darse cuenta de que una yegua está preñada hasta prácticamente el final de la preñez, que dura entre 336 y 360 días. La mayoría de los signos visibles de embarazo ocurren aproximadamente dos o tres meses antes del nacimiento. Con un conocimiento básico de cómo funciona el cuerpo de la yegua durante este período, los propietarios pueden percibir la condición sin la ayuda de un veterinario.
Paso 1
Pregunte a los dueños anteriores u otras personas que conozcan a la yegua sobre su historia. Si es tuya, intenta recordar si tuvo acceso a un semental.
Paso 2
Examine los lados del cuerpo de la yegua antes del flanco, así como la parte posterior de su vientre, delante de la ubre. A medida que el potro comience a crecer, estas áreas se expandirán.
Paso 3
Compruebe si hay un aumento de las glándulas mamarias. La ubre aumenta de tamaño para almacenar leche entre dos y seis semanas antes del parto y se llena de leche entre dos y seis días antes del parto. La ubre de la yegua también puede hincharse debido al consumo de hierba rica, un embarazo falso o una infección.
Paso 4
Examine los muslos y las nalgas de la yegua. Cuando faltan una o dos semanas para el parto, esta región tendrá una apariencia esponjosa a medida que el animal se prepara para dar a luz y la vulva comienza a expandirse.
Paso 5
Busque una sustancia cerosa en la ubre. Esto ocurre entre una y 72 horas antes del nacimiento.