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Una úlcera del duodeno es ocasionada por un daño o fractura en el revestimiento de los intestinos, luego del estómago. Cuando el daño ocurre, los ácidos presentes en el estómago profundizan la rotura y el resultado es una úlcera. Las úlceras ocurren en personas de todas las edades, tanto hombres como mujeres y, afectan aproximadamente del 5% al 10% de la población. Algunas úlceras pueden desarrollarse rápidamente, mientras que otras pueden tardar años. Las úlceras del duodeno son las más comunes y, también se llaman úlceras pépticas.
Consejos de dieta
Consumir grandes comidas lleva al estómago a producir grandes cantidades de ácido estomacal, lo que tiende a causar úlceras. Es mejor comer comidas más pequeñas. Las dietas para los portadores de úlceras deben tener baja grasa y azúcar y altas cantidades de fibras. Una dieta que es rica en pescados grasos, como el salmón, la caballa, la sardina y el arenque, ayuda a revestir el estómago y el canal alimentario y previene la quiebra de este revestimiento. Coma frutas y vegetales frescos como: zanahoria, col, kiwi y albaricoque, que ayudan a proteger el revestimiento estomacal con betacaroteno pero, evite los cítricos. Comidas ricas en vitamina E, como el germen de trigo y avellanas son conocidas por sus propiedades de recuperar los intestinos.
Menús de muestra
Una dieta sana es el mejor camino para una persona que tiene úlcera. Una muestra de una buena dieta para el día puede incluir un tazón de avena, con un huevo revuelto y café descafeinado negro para el desayuno. El almuerzo puede consistir en un sándwich de pavo con queso cheddar en un pan integral, con palillos de zanahoria y una botella de agua. Para la cena puede haber pescado en el vapor o pollo asado con patatas amasadas. Los aperitivos de la tarde pueden ser frutas frescas, como uvas o kiwi.
Comidas a evitar
Evite comer comidas picantes y templadas que pueden agravar la úlcera, particularmente, comidas con fuertes condimentos como pimienta, curry y mostaza. El alcohol y la cafeína pueden aumentar la acidez en el estómago. Ambos deben ser consumidos con parsimonia. Las dietas que tienen altos niveles de sal están entre las que ofrecen mayores riesgos para las úlceras digestivas. No coloque demasiada sal en la comida y, quédese lejos de comidas que tienen altos niveles de sodio, como sopas, chips de tortillas, patatas chips, chips de maíz, nueces saladas, carnes saladas, queso azul y copos de maíz.