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Colocar azulejos u otro tipo de piso sobre un piso de madera es muy fácil. Ya quitar la cola del piso de su piso de madera, al intentar restaurarlo, es mucho más difícil. Después de haber retirado el azulejo, alfombra, linóleo u otro revestimiento, hay algunos pasos más o menos drásticos que usted puede ejecutar para dejar la superficie de madera libre de cola y lista para el retoque.
raspar
Si un tipo diferente de piso se colocó sobre su piso de madera, es probable que tenga que lijar y retocar el piso de madera de todos modos, entonces unos arañazos más no será problema. Pruebe varios raspadores para quitar la cola seca, incluyendo espátulas de revoque, raspadores de tinta e incluso un rascador con navaja (normalmente utilizado para raspar tinta de las ventanas). La elección del mejor utensilio dependerá de su suelo y de la naturaleza del pegamento. No arranque el suelo mientras está raspando, si el pegamento no puede ser lijado por estar muy profundo.
vaporización
Agua hirviente ablandará y soltará varios tipos de pegamento, permitiendo que usted raspe con una espátula. Comience por un área pequeña, vierta un poco de agua hirviendo sobre la cola, deje vaporizar por un minuto y luego raspe. Utilice guantes de goma gruesos para evitar quemaduras. Asegúrese de que tiene muchas toallas a mano para secar el agua inmediatamente, evitando que penetre en la madera y dañe. Este procedimiento no siempre funciona, pero cuando funciona, hace que el proyecto sea mucho más fácil.
Decapantes químicos
Su último recurso debe ser usar productos químicos para quitar la cola del piso. Hace el desorden, los gases son malos y el producto agredirá más la madera que cualquier otro proceso, pero hay situaciones en las que usted no tiene elección. Se informe en una tienda de herramientas sobre lo que es necesario y asegúrese de usar un producto de limpieza más suave que el indicado para madera. Siga las instrucciones. Utilice gafas y guantes de protección, y abra las ventanas de la habitación para ventilarlo. Cuando termine, limpie el suelo completamente con agua y jabón para deshacerse de los residuos del producto químico.