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Al tratar a pacientes con muy mal aliento o enfermedad de las encías, un dentista puede recomendar un enjuague bucal con lejía. Siempre que el paciente no sea alérgico a este producto y use las cantidades correctas, esta mezcla es segura y puede usarse regularmente.
Paso 1
Mide 1 taza y media de agua y vierte en un recipiente de plástico.
Paso 2
Mide 1 cucharada de lejía y viértela en el recipiente con agua.
Paso 3
Revuelva para mezclar bien el contenido.
Paso 4
Enjuágate la boca con 1 cucharada de la mezcla durante 20 segundos. Escupir después de 20 segundos, teniendo cuidado de no tragar nada.
Paso 5
Enjuáguese bien la boca después con agua limpia durante 30 segundos y escupe.
Paso 6
Repita el enjuague con lejía y agua cada dos días para mantener la boca limpia y combatir la enfermedad de las encías.