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La mayoría de los alumnos de jardín de infancia pueden identificar fácilmente formas planas, como cuadrados, círculos y triángulos. Ya identificar y trabajar con formas tridimensionales es mucho más difícil, y ellos necesitan muchas oportunidades para explorar formas tridimensionales antes de que sean capaces de visualizar y reconocerlas. Proporcione a los alumnos actividades prácticas con formas tridimensionales para promover el entendimiento.
Los alumnos del jardín de infantes les gusta trabajar con formas tridimensionales durante las lecciones de matemáticas (Jupiterimages / Comstock / Getty Images)
Caza de formas en la cocina
Después de presentar las seis principales formas tridimensionales para los alumnos - esfera, cubo, cono, prisma rectangular, cilindro y prisma triangular -, envíelos a casa con una misión. Invita a los alumnos ya los padres a ir a la cocina, buscar formas tridimensionales y traer a tu favorita. La cocina está llena de formas tridimensionales, como cajas de cereales, conos de helado, envases de harina de avena y recipientes de plástico. Cuando los alumnos regresan a la escuela con sus ítems, clasifíquelos por el formato que poseen. Compare y muestre las diferencias entre los elementos, discutiendo cómo cada forma puede ser muy diferente, dependiendo del tamaño y el material. Deje que los alumnos se apunten y expliquen cómo sienten los elementos y los exhiben en el centro de la sala para una mayor exploración.
¿Qué puedo hacer?
Ayude a los alumnos a comprender mejor las propiedades de formas tridimensionales, explorando formas que pueden desplazarse, ser apiladas y deslizadas. Cree una tabla en papel pardo escribiendo los seis tipos de formas en la vertical izquierda del papel y las tres acciones (desplazarse, apilar y deslizar) en todo el lado superior horizontal del papel. Reúna a los alumnos y discuta las formas y acciones, alentando a los alumnos a hacer predicciones y discutir experiencias anteriores. Pruebe cada forma para cada acción y registre los resultados. Por ejemplo, un cubo puede apilar y deslizarse, pero no rola, y la esfera puede desplazarse, pero no se puede apilar o deslizar. Los alumnos tendrán que identificar y discutir por qué la acción es o no posible en cada forma. Por ejemplo, un cilindro puede hacer los tres, porque tiene características tanto de una esfera como de un prisma rectangular, mientras que un cubo no puede rodar porque no tiene ningún lado redondeado. Continúe la actividad hasta que el cuadro esté completo. Si lo desea, haga que los estudiantes creen una copia individual del cuadro y permita que ellos gravan también los resultados.
¿Cuántas?
Incentive a los alumnos a explorar de forma independiente formas tridimensionales haciendo que la clase cuente cuántas aristas, puntos y caras cada forma tiene. Divida a los alumnos en pequeños grupos en las mesas de trabajo y coloque un ejemplo de cada forma tridimensional en cada mesa. Haga fotocopias y distribuya una tabla para cada alumno con las formas en el lado izquierdo del papel y las propiedades (aristas, puntos y caras) en la parte superior. Enseñe cómo contarlas y completar juntos una fila de la tabla. Por ejemplo, un cubo tiene 12 aristas, ocho puntos y seis caras, mientras que un prisma triangular tiene ocho aristas, cinco puntos y cinco caras. Deje que los alumnos completen el resto de la tabla, explorando los objetos en sus cuadros y escribiendo los números en la tabla. Incentive la cooperación de los colegas y cheque las respuestas, circulando por el aula y orientando a los alumnos con dificultades. Una vez que la clase haya completado las tablas, reúna a los alumnos para comparar las respuestas y revise las seis formas, verificando con ellos el número de cada propiedad. Haga que los alumnos discuten sobre el tema, animándoles a observar qué forma tiene más y menos de cada propiedad.
Crear una forma
Desafíe a los alumnos a crear formas tridimensionales usando masilla o masa de modelado. Asigne a pares de alumnos esa actividad y animarlos a trabajar juntos para crear la forma. Proporcione ejemplos o guíelos para que encuentren sus propios ejemplos en el aula, recordando a los alumnos acerca del número de puntos, lados y caras de cada forma. Permita que compartan sus creaciones con otros pares y discuta cómo diferentes pares construyeron la misma forma con diferentes características (tamaño, color o orientación). Asigne a los grupos una nueva forma y repita la actividad.