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Los perros se comportan de maneras variadas para comunicar sus necesidades a sus dueños. Llorar y caminar sin rumbo son dos de los muchos conductos caninos que pueden indicar problemas de ansiedad a una necesidad por atención o incomodidad física. En algunos casos, el entrenamiento puede corregir estos comportamientos no deseados. En otros, sin embargo, aliviar la causa subyacente al comportamiento puede requerir tratamiento médico. En general, no ignore el llanto de su perro; este comportamiento generalmente se produce por una razón.
ansiedad
Los perros generalmente sienten ansiedad y demuestran eso en agitación (como caminar sin rumbo) y llanto. La ansiedad, a veces, resulta de la separación, ruptura en la rutina u otra situación estresante. En estos casos, el llanto del perro puede ser involuntario e incorregible sin el tratamiento de la causa de la ansiedad en sí. Mantener una rutina regular, con bastante ejercicio y usando un tratamiento con feromona calmante puede ayudar a ralentizar la ansiedad en los perros.
atención
Muchos perros usan el llanto como manera de comunicar una necesidad a los dueños, sea la necesidad de afecto, comida o placer. Para corregir el llanto que llama por atención, ignore al perro hasta que se detenga; además, cuando el perro busque atención sin llorar (como extender la pata o oler la mano), refuerce el comportamiento con agrado y cariño. El entrenamiento profesional puede ayudar a corregir el llanto que llama por atención.
Enfermedades físicas
Las enfermedades físicas y la incomodidad en perros pueden resultar en comportamientos como el llanto y el andar excesivo y sin rumbo. En particular, la caminata sin rumbo puede ser una señal de dolor o angustia en el animal, posiblemente venida de problemas digestivos o estómago lleno. Un llanto repentino y ritmado puede indicar que el perro está sintiendo mucho dolor; marque una consulta con el veterinario para eliminar problemas serios.
Perros mayores
Conforme envejecen, el comportamiento y los hábitos de los perros cambian y un perro antes calmado puede volverse propenso a caminar sin rumbo o llorar más que en el pasado. Esto puede ser el resultado de cambios físicos, como pérdida de pelos, o de cambios cognitivos, como el descenso de la adaptabilidad al cambio. Los dueños deben atentar a actividades que desencadenan el comportamiento, como separación, y discutir las causas posibles y los tratamientos con el veterinario.
