Contenido
Banisteriopsis caapi es el nombre botánico del mariri o jagube, una especie de enredadera tropical originaria de la cuenca del Amazonas de América del Sur, que los pueblos indígenas utilizan en ceremonias y prácticas curativas debido a su alta concentración de alcaloides alucinógenos. Cultivar Banisteriopsis caapi es un desafío para la mayoría de los jardineros, ya que las plántulas se desarrollan lenta y fácilmente sucumben a las infecciones por hongos. Sin embargo, con el manejo cuidadoso del calor, la humedad y la luz, las plántulas eventualmente crecerán lo suficiente como para trasplantarlas a macetas permanentes y vivirán muchos años si se cultivan en condiciones ideales.
Paso 1
Llenar el semillero con un sustrato compuesto por un 25% de su contenido de perlita. Rocíe agua sobre el suelo hasta que esté muy húmedo en la superficie.
Paso 2
Coloque las semillas en el suelo, a 3 cm de distancia.
Paso 3
Presione las semillas en el suelo para que estén justo debajo de la superficie. Extienda una capa de arena de 5 mm sobre el suelo
Paso 4
Envuelva la semilla en una envoltura de plástico para crear un ambiente de invernadero para las semillas, pero tenga cuidado de no aislar la semilla del aire.
Paso 5
Coloca la siembra sobre el tapete, ajustando la temperatura a unos 30 grados centígrados, reduciendo la temperatura a 20 grados por la noche.
Paso 6
Coloque una luz fluorescente de 40 cm de altura sobre el semillero para proporcionar luz durante ocho a diez horas al día a las semillas. Apague la lámpara durante la noche.
Paso 7
Humedezca la tierra alrededor de las semillas siempre que esté seca al tacto. Salpique el agua hasta que las primeras pulgadas de tierra estén bien húmedas.
Paso 8
Retire la envoltura de plástico de vez en cuando para eliminar la condensación y evitar el exceso de humedad, que puede causar infecciones por hongos. Deje que la tierra se lije durante 20 minutos antes de volver a envolverla.
Paso 9
Esté atento a los signos de germinación alrededor de 30 días después de plantar las semillas. Mantenga las semillas en el invernadero hasta que tengan al menos dos pulgadas de alto.
Paso 10
Trasplante las plántulas en macetas de 10 cm de altura llenas de un buen sustrato justo después del segundo par de hojas. Mantenga las plantas en un ambiente constantemente cálido y brillante.