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Los cachorros recién nacidos pueden tener varios problemas de salud, entre los que las infecciones oculares son bastante frecuentes. La infección puede haber sido causada por varios factores, desde rascarse accidentalmente mientras se compite por un lugar para amamantar, hasta cuando la propia madre lame la cara de un cachorro justo después de haber lamido su trasero. Independientemente del motivo, las infecciones oculares pueden convertirse en un problema grave, por lo que es importante que se traten rápidamente.
Diagnóstico de infecciones oculares
Es muy común que los gatitos con infecciones oculares tengan pus saliendo de sus ojos. El pus es un residuo viscoso de color que también puede tener olor. El ojo también puede mostrar enrojecimiento y el tercer párpado está expuesto. Además, si hay una gran cantidad de pus en los ojos del cachorro, puede hacer que se cierren. Los gatos pequeños también pueden tener residuos transparentes saliendo de sus ojos, pero esto generalmente no es grave y se puede resolver con solo una limpieza.
Tratamiento de infecciones oculares
Si a tu gato le sale pus por los ojos, no trates de tratarlo tú mismo, ya que necesita antibióticos que solo puede recetar un veterinario. Si la infección no se trata, se extenderá a través del globo ocular y dentro de la cuenca del ojo, lo que puede provocar ceguera. Esto es extremadamente dañino para los gatos salvajes que pueden volverse incapaces de encontrar comida, lo que lleva a la inanición.
Al llevar al cachorro al veterinario, lo primero que hará es sacar el pus del ojo. Es posible que también deba hacer esto en casa. Use gasa de algodón empapada en solución oftálmica estéril para limpiar el ojo y mantenerlo limpio. Trate de no frotar la mancha, ya que podría terminar empujando pus hacia el ojo. Luego, el veterinario verificará si hay úlceras causadas por un rasguño o irritación. Le recetará un antibiótico en gotas o ungüento para tratar la infección. Dependiendo de la gravedad del problema, los remedios deberán aplicarse solo unas pocas veces al día, durante aproximadamente una semana. Si la infección es particularmente grave, puede ser necesario un tratamiento más prolongado.
Para aplicar el ungüento ocular es mejor hacerlo entrando por detrás del cachorro. Sosténgalo con la espalda presionada contra su vientre. Mantenga el ojo del gato abierto con una mano mientras usa la otra para administrar el medicamento. Si está usando un ungüento, haga una línea sobre la mancha teniendo cuidado de no tocar los ojos del cachorro con la punta del aplicador. Si se lo va a aplicar en gotas, sostenga el frasco a unos centímetros de su cara y aplique la cantidad prescrita en el ojo enfermo. Si después de unos días de tratamiento, el ojo parece estar empeorando o no muestra mejoría, comuníquese con su veterinario.
Cuanto antes comience a tratar la infección, antes sanará. Si responde rápidamente al problema, las posibilidades de daño permanente son menores.