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Cuando se trabaja con una tubería de agua, especialmente con tuberías antiguas o expuestas a los elementos, no siempre es una tarea sencilla desenroscar dos piezas. El óxido forma una conexión entre dos tubos de metal que pueden ser más fuertes que el pegamento si intentas rotarlos. Es posible desatornillar los tubos, si el sello oxidado entre ellos se rompe primero. Existen algunas técnicas para realizar esta tarea sin tener que contactar a un plomero.
Paso 1
Limpie las áreas alrededor de la conexión de la tubería con un cepillo de alambre o papel de lija grueso para eliminar la mayor cantidad de óxido posible. No presione demasiado para no dañar el tubo. La idea es simplemente llegar al metal, no eliminar todo el óxido visible.
Paso 2
Rocíe el lubricante en la unión de los dos tubos. Trate de guiarlo alrededor de la conexión para que el lubricante se absorba entre las piezas. Para tuberías muy oxidadas y selladas, deje que el lubricante actúe durante 15 minutos antes de intentar desenroscarlas. Si es necesario, agregue más lubricante.
Paso 3
Limpie cualquier exceso de lubricante en el exterior del cañón con un paño limpio y use una esponja para eliminar los residuos. Deje que el tubo se seque por completo, luego use un soplete de propano para calentar las dos partes conectadas. Muévalo hacia adelante y hacia atrás durante aproximadamente un minuto para ayudar a que el metal se expanda ligeramente. Deje que el material se enfríe un minuto más.
Paso 4
Utilice una llave y gírela con cuidado para que no dañe el metal. Haga esto antes de que el tubo se haya enfriado por completo para obtener el mejor resultado. Si aún no se suelta, repita el proceso de lubricación y vuelva a intentarlo. Caliente la tubería por segunda vez, si el spray no funciona.