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Las plantas de dipladenia y mandevilla a menudo se confunden entre sí porque la forma y los colores de las flores en ambas plantas son similares. Sin embargo, existen diferencias distintivas entre estas dos plantas tropicales: cómo crece cada una, su follaje e incluso sus flores definirán qué planta estás cultivando.
Crecimiento
Las mandevillas tienen tendencia a trepar y suelen venderse en una maceta con una rejilla que las soporta. Una planta de dipladenia también se puede cultivar en una maceta. Sin embargo, de esta manera tiende a no trepar, sino que se convierte en un pequeño arbusto. De vez en cuando, encontrará dipladenia formada para crecer como una enredadera corta, pero nunca hasta el punto en que llega una mandevilla.
Follaje
El follaje u hojas de cada planta le permitirá saber qué planta está cultivando. Las hojas de mandevilla son más largas y estrechas que las hojas de dipladenia, que son más anchas y en forma de corazón. Las hojas de Dipladenia tienen una sensación más gruesa y suave, mientras que las hojas de mandevilla son rugosas y con textura.
Flores
A primera vista, las flores de mandevilla y dipladenia pueden verse iguales. Si compara estas flores, notará que las flores de dipladenia son un poco más pequeñas que las flores de mandevilla. Originalmente, la dipladenia producía flores que eran de color rosa claro, hoy existen más de 100 especies de dipladenia que producen flores rojas, blancas, amarillas y rosadas. Las flores de la mandevilla suelen presentarse en tonos rojos (aunque es posible encontrar mandevillas que producen flores rosas, amarillas y blancas).