Contenido
La disfunción vestibular es una enfermedad que causa problemas de equilibrio, como mareos. Puede variar en gravedad, durar solo unos segundos o ser crónica, causando una discapacidad total. En general, esta disfunción significa que hay un problema con el oído interno y el procesamiento sensorial que lo acompaña. Hay muchas causas y consecuencias diferentes de la disfunción vestibular.
El sistema vestibular
El mecanismo de equilibrio requiere la coordinación entre los ojos, el oído interno, las articulaciones y los músculos. Cada uno de estos órganos vitales envía información de posición al cerebro, lo que le permite equilibrar el cuerpo. El oído interno es el órgano más sensible y cualquier problema, llamado disfunción vestibular periférica, puede imposibilitar el equilibrio.
Estadísticas
En 2004, al 35,4% de la población estadounidense se le diagnosticó disfunción vestibular. Entre los adultos, el 4% dice tener problemas crónicos de equilibrio y el 1,1% dice tener problemas crónicos de mareos.
Prueba de rotacion
Una forma de verificar la disfunción vestibular es la prueba de rotación. El paciente mueve la cabeza en direcciones específicas y, para cada movimiento, el ojo debe moverse en la dirección opuesta. De lo contrario, el oído interno y los ojos no se coordinan adecuadamente, lo que indica la presencia de disfunción vestibular.
Síntomas
Esta disfunción puede causar una amplia variedad de síntomas, que varían en gravedad. Van desde una discapacidad leve, casi imperceptible, hasta una tan grave que llega a la discapacidad total. Los síntomas pueden incluir mareos y vértigo, problemas de equilibrio, náuseas, dolores de cabeza y malestar. Otros síntomas que no están relacionados con la coordinación motora son: dificultad para concentrarse, olvidos, ansiedad, ataques de pánico, problemas de audición y visión. Dependiendo del tipo y la gravedad de la enfermedad, una persona que sufre de disfunción vestibular puede sufrir de pocos a muchos de estos síntomas.
Causas y tratamientos
Cualquier lesión o enfermedad degenerativa que cause daño al oído interno puede causar disfunción vestibular. Las lesiones como los impactos en la cabeza pueden dañar los sacos membranosos del oído interno, haciendo que la víctima no pueda mantener el equilibrio. La disfunción vestibular también puede ser causada por la vejez. La rehabilitación es necesaria para curar esta disfunción, ya que tales lesiones son imposibles de reparar. Consiste en ejercicios que entrenan el equilibrio, permitiendo al paciente desarrollar las habilidades necesarias para equilibrar y mantener la postura exclusivamente a partir de estímulos visuales, musculares y articulatorios.