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Toda la materia consiste de una sustancia puta o de la mezcla de dos o más sustancias. Los coloides son mezclas compuestas de partículas dispersas en otra sustancia. Los químicos clasifican un coloide de acuerdo con los estados físicos de sus constituyentes, con la naturaleza de la interacción entre sus componentes, así como la naturaleza de las partículas dispersas.
La niebla es un coloide constituido por gotitas de agua dispersas en el aire (Jupiterimages / Polka Dot / Getty Images)
Fases de un coloide
Los sistemas coloidales contienen dos fases: la fase dispersa y el medio de dispersión. La fase dispersa es la sustancia presente en menor cantidad. Se compone de partículas que miden entre 1 y 100 nanómetros. El medio de dispersión es la sustancia en la que las partículas están dispersas. Cada una de las dos fases puede ser un sólido, un líquido o un gas. Las partículas dentro de un sistema coloidal aislado permanecen dispersas y no sedimentan o se separan del medio de dispersión.
Estados físicos
Los coloides se clasifican típicamente según los estados físicos de sus fases constituyentes. Aerosoles, espumas, emulsiones, soles y geles son tipos de coloides. Los aerosoles son gotitas líquidas o partículas sólidas dispersas en un medio gaseoso. La niebla y el humo son aerosoles. Cuando un gas se dispersa en un medio líquido o sólido, el coloide se llama una espuma. El chantilly es una espuma compuesta de aire disperso en crema de leche. Una emulsión, como la mayonesa, se trata de un líquido disperso en otro líquido. El sol resulta de la dispersión de un sólido en un líquido o en otro sólido. Tintas y fluidos celulares son soles. Geles, tales como gelatina y queso, consisten en líquidos dispersos en un medio sólido.
Intervalo entre las fases
Los sistemas coloidales también se clasifican de acuerdo con el tipo de interacción que existe entre la fase dispersa y el medio de dispersión. Cuando la fase dispersa y el medio de dispersión se atraen, el coloide se clasifica como liofílico. Las fuerzas de atracción entre los dos hacen el coloide estable. Si la fase dispersa es separada del medio de dispersión por medio de un proceso tal como la evaporación, el coloide puede ser recreado por la simple adición de más medio de dispersión. En consecuencia, las coloides liofílicas son reversibles. La gelatina y el almidón son ejemplos de sistemas coloidales liofílicos. Los componentes de los sistemas coloidales liofóbicos se repelen. Cuando se mezclan, no pasan directamente a un estado coloidal, por consiguiente, su preparación requiere métodos especiales. Por estos coloides son inestables, ellos exigen agentes estabilizantes para permanecer como coloides. Una vez separados, no pueden volver a su forma coloidal a través de la adición de otro medio de dispersión, por lo tanto, coloides liofóbicos son irreversibles.
Naturaleza de las partículas
Algunos químicos clasifican los coloides en base a la naturaleza de sus partículas. Coloides multimoleculares contiene agregados de átomos o moléculas, unidas por débiles fuerzas de atracción, llamadas fuerzas de Van der Waals. Los coloides multimoleculares son liofóbicos. Las partículas coloidales macromoleculares son moléculas gigantes constituidas por muchas moléculas pequeñas, unidas por enlaces covalentes. Los coloides macromoleculares son liofílicos. Las partículas coloidales de asociación, llamadas micelas, poseen dos partes en su estructura molecular: una parte liofílica y una parte liofóbica. Detergente y jabón forman coloides de asociación.