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Mientras algunos expertos en lenguaje corporal apuntan que parpadear los ojos puede ser un indicador de que la persona está mintiendo, las opiniones de los profesionales se dividen sobre cómo esa señal puede mostrar una mentira. Algunos estudios señalan que una persona parpadea con mayor frecuencia cuando está mintiendo, ya otros sugieren lo opuesto.
Muchos creen que los ojos o los párpados pueden exponer un metiroso (vista previa de Mat Hayward de Fotolia.com)
Piscar a menudo
Es ampliamente aceptado en la cultura popular que picar los ojos en exceso durante cuestionamientos es una señal de mentira. Los expertos en lenguaje corporal siempre apuntan esas características como indicador de mentira. La psicología detrás de esta razón es que el parpadeo de los ojos está relacionado con la señal de nerviosismo, otros incluyen transpiración, inquietud o falta de contacto visual. Los defensores de esta teoría afirman que las personas que mienten se ponen nerviosas y no logran controlar algunas reacciones físicas y neurológicas que resultan del estrés de la mentira.
Piscar con menor frecuencia
Otra escuela de pensamientos es que el parpadeo de ojos indica fraude, pero la persona que está mintiendo parpadeará con menor frecuencia y no mayor. Posibles explicaciones incluyen la hipótesis de que la persona que está engañando conscientemente está más concentrada de lo normal. Se dice que quien está contando una mentira necesita esforzarse más, lo que lo hace quedarse quieto, con pocos movimientos, debido a la concentración.
Bajo observación
Un estudio de 2010 midió la cantidad de veces en que 26 participantes parpadearon en ambientes controlados. Se concluyó que aquellos que estaban mintiendo parpadearon menos veces que aquellos que respondían honestamente. Las personas que fueron verdaderas no exhibieron cambios significantes de comportamiento.
complicaciones
Talk shows y periódicos muestran a menudo expertos que analizan el lenguaje corporal de celebridades y figuras políticas para llegar a conclusiones sobre mentiras. Algunos de ellos notaron que algunas veces una persona parpadea antes o después de contar la mentira, pero nunca durante. La información científica apoya esta teoría, pero las sutilezas de este análisis terminan perdiendo cuando se usa con la población en general, que cree en la teoría del "parpadeo de ojos". A medida que se realizan más investigaciones, se percibe que este análisis es mucho más complicado que una cuestión estadística.
conclusiones
A pesar de que los ojos son la ventana del alma, sólo enfocar en el modo en que la persona parpadea no es la mejor manera para determinar si está o no siendo verdadera. Los estudios detallados que se centran sólo en esta cuestión son muy raros, aunque los investigadores parecen acordar que una mentira tiene algún efecto sobre el parpadeo de una persona. Estos datos deben ser considerados como un criterio para el análisis de la reacción física en momentos de estrés, como mentiras. Sólo los ojos no cuentan toda la historia.