Contenido
El síndrome de Cushing afecta a adultos de entre 20 y 50 años y afecta a unos 15 millones de personas cada año.A veces llamado hipercortisolismo o hiperadrenocorticismo, se produce cuando los tejidos del cuerpo están expuestos durante mucho tiempo al cortisol, una hormona que se encuentra en la sangre, o glucocorticoides, que se utilizan para tratar enfermedades inflamatorias. Algunas personas padecen esta enfermedad debido al uso de esteroides para el asma, la artritis o el lupus. El síndrome requiere una dieta especial (véanse las referencias 1 y 2).
Que es el cortisol
El cortisol es una hormona que se encuentra en la sangre. Las hormonas son sustancias químicas especiales que viajan a través de la sangre a diferentes partes del cuerpo para realizar su trabajo. Cuando las glándulas suprarrenales se sobreproducen, el cortisol comienza a descomponerse y establece el síndrome de Cushing (consulte la referencia 3).
Dieta
La mayor información que se puede tener es que, después de adquirir Cushing, la persona debe seguir una dieta rica en proteínas. Este síndrome descompone las proteínas, elimina el calcio y deposita capas de grasa por todo el cuerpo (ver referencia 3).
Entonces, ¿es necesario seguir una dieta exclusivamente proteica? No es así, dice Barbara Craven, Ph.D .., RD, LD y especialista en los exámenes de Cushing. El Dr. Craven dice que primero se debe normalizar el apetito. Intenta eliminar los carbohidratos refinados: harina blanca y azúcar blanca. Además, elimine las grasas animales. Sin embargo, también dice que no debe privarse por completo de la energía de los carbohidratos. Necesita carbohidratos, ya que son el combustible del cuerpo. El cuerpo los quema y luego la grasa. Sin carbohidratos, el cuerpo comenzará a quemar músculos para nutrirse. Si está limitando su ingesta de carbohidratos y termina quedándose sin energía, coma un pequeño trozo de chocolate.
Necesita más proteínas en su dieta, así como calcio, ya que la pérdida de masa ósea puede ocurrir debido a los altos niveles de cortisol. Los suplementos, como calcio o vitamina D, pueden ayudar a alcanzar la cantidad diaria deseada. Además, limite la cantidad de sal en la dieta. El exceso puede causar hipertensión arterial, que ya es una de las complicaciones de este síndrome (ver referencia 1).
Otras ayudas
La dieta por sí sola no es capaz de solucionarlo todo. Debido a la posible pérdida ósea, una de las mejores cosas es el ejercicio regular. Más concretamente, los de levantamiento de pesas, como entrenamiento con pesas, flexiones o abdominales. Dado que el aumento de peso en el torso y la cara son efectos secundarios comunes de Cushing, los ejercicios que aumentan la frecuencia cardíaca son muy convenientes (consulte la referencia 3). Realice actividades como trotar, correr, nadar y montar en bicicleta.