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Una actividad sensorial es cualquier actividad enfocada en la incorporación y el compromiso de los sentidos. Ellas son una parte esencial del desarrollo del niño y del bebé, pues les ayudan a descubrir y desarrollar un conocimiento de sus cuerpos y cómo se relacionan y retiene el conocimiento de su mundo. Mientras que en algún nivel, cualquier actividad requiere el uso de los sentidos, una buena actividad sensorial debe involucrar la mente, así como los sentidos de su hijo.
Las actividades sensoriales para niños y bebés deben involucrar tanto la mente y los sentidos (Jupiterimages / Comstock / Getty Images)
Cajas o mesas sensoriales
Las cajas y mesas sensoriales están diseñadas para dar a los niños una variedad de experiencias táctiles y auditivas. Un buen ejemplo de una caja sensorial es una bañera rasa llena de frijoles o lentejas, con una variedad de herramientas y juguetes que un niño podría usar para cosechar los granos y jugar con ellos. Esto da al niño el interés táctil, envolviéndola mientras explora la forma en que los granos son tocados y reconocidos al manipularlos en la caja. Una mesa sensorial puede incorporar una serie de diferentes texturas o sonidos, tales como el papel de tejido arrugado, arena, masilla blanda o un plato de agua y una esponja. A pesar de no ser apropiada para los muy pequeños, esta es una gran actividad sensorial para los niños.
Los frijoles o lentejas en una caja rasa hacen una gran actividad sensorial para los niños (Jupiterimages / Comstock / Getty Images)
Hora del baño
No hay mejor actividad sensorial tanto para los bebés como para los niños pequeños que darles un baño. La sensibilidad del agua y la toalla en su piel y el sonido de las gotas, junto con su toque, hacen la hora del baño una incorporación maravillosa de muchos sentidos. Conforme su bebé se mueve a la etapa de niño, añadir burbujas y juguetes para el baño puede agregar otra capa de actividades sensoriales para esa hora.
La hora del baño es una excelente oportunidad para una actividad sensorial (Digital Vision./Digital Vision / Getty Images)Oír música
Nunca es demasiado pronto para introducir el amor por la música en su hijo. Para hacer una actividad sensorial de escuchar música, encuentre una canción que usted y su hijo puedan interactuar. Las canciones como "Cabeza, hombro, rodilla y pie" o "Ciranda, cirandinha" relacionan el sentido de la audición e interacción inmediata con la letra de la canción. Si usted es un músico, tocar un instrumento y cantar a sus hijos puede ser una gran manera de construir su aprecio por la música y comprometer sus sentidos.
Construye una apreciación para la música desde temprano en tu hijo (Jupiterimages / Goodshoot / Getty Images)
Juguetes al aire libre
Cuando sea posible, haga actividades sensoriales al aire libre. Los sonidos y paisajes de la naturaleza despiertan la curiosidad natural de cualquier niño, y sus sentidos estarán adaptados a los diversos estímulos a su alrededor. Deje a su hijo explorar la sensación de césped en sus pies o apuntar la forma en que su sombra se mueve con él, o hacer una actividad al aire libre como burbujas de jabón o rayar tiza en la acera. Hay infinitas maneras de conseguir que su hijo se involucra con la naturaleza.
Llevar al niño para jugar al aire libre ofrece una riqueza de estímulos sensoriales y actividades de integración (Jupiterimages / Creatas / Getty Images)