Contenido
Hay muchas razones por las cuales una lavadora no centrifuga correctamente o lo suficientemente rápido.Las posibilidades más serias, como correas o bombas de agua dañadas o rotas, pueden necesitar asistencia profesional. Otras causas incluyen cubiertas rotas o problemas con el motor. Puede solucionar algunos defectos menos complicados que pueden ser responsables de reducir la velocidad de centrifugado de la máquina.
Paso 1
Desconecte la máquina de la corriente.
Paso 2
Retire cualquier artículo del interior. Utilice la linterna para inspeccionar su interior en busca de posibles objetos que bloqueen el movimiento adecuado del agitador y retírelos.
Paso 3
Inspeccione entre los tubos interior y exterior de la máquina para ver si hay objetos pequeños que puedan haberse atascado, impidiendo que el tubo gire correctamente. Utilice unos alicates para quitarlos, si es necesario.
Paso 4
Quite los tornillos a lo largo de la placa posterior para acceder al panel, generalmente entre seis y diez tornillos. Déjelos a un lado, levante y retire el panel trasero. Inspeccione la bomba, que generalmente parece un mecanismo de plástico, cerca de la parte inferior de la máquina. Si quedan restos u objetos atrapados en él, la máquina no girará correctamente. Quite cualquier residuo y reemplace el panel. Vuelva a apretar los tornillos.
Paso 5
Limpiar la puerta o el dispositivo de tapa, que es el mecanismo encargado de mantenerla cerrada, con un paño húmedo y cerrar herméticamente. La máquina no funcionará si su tapa se deja entreabierta. Cierre también los cajones del interior de la máquina.
Paso 6
Reduzca la cantidad de ropa dentro de la máquina para equilibrar la carga. Use solo la cantidad recomendada de jabón y elija ciclos de centrifugado estándar, ya que los ciclos o velocidades como "Delicado", "Extra lento" o "Lento" reducirán la potencia del centrifugado.
Paso 7
Utilice asistencia profesional si su máquina continúa girando lentamente.