Contenido
Las almohadillas son esos gruesos trozos de piel en las plantas de las patas de un gato. Cada pata tiene siete almohadillas que absorben el impacto, las protegen de lesiones y ayudan a escalar. Aunque los gatos domésticos son menos susceptibles a las lesiones al aire libre, como peleas con otros animales y caídas, aún pueden lesionarse las patas. En la mayoría de los casos, estas heridas se pueden tratar en casa. Observar a su gato le permitirá saber si su gato necesita atención médica profesional y cuándo.
Paso 1
Lave la pata con agua tibia y retire con cuidado la suciedad, los escombros o la sangre de la herida. Evite usar paños o toallas de papel para limpiar la herida, ya que esto puede dejar pequeñas partículas.
Paso 2
Compruebe si hay objetos extraños alojados en la herida. Los gatos a menudo se lastiman las patas con vidrios rotos. Si nota astillas de vidrio u otros desechos, use unas pinzas para sacar el objeto extraño de la herida. Si el objeto está profundamente alojado en la pata, no intente sacarlo usted mismo y comuníquese con un veterinario.
Paso 3
Inspecciona la herida. Si hay piel suelta alrededor de la herida, sangrado que dura más de unos pocos minutos o alguna estructura interna visible, llame a un veterinario.
Paso 4
Aplique un ungüento antibiótico a la herida y coloque un collar isabelino en el gato. Esto evitará que lame la herida hasta que esté desprotegida o infectada. Estos collares generalmente se pueden encontrar en una tienda de mascotas o en línea.
Paso 5
Lave la herida y vuelva a aplicar la pomada antibiótica a diario. Si la herida se hincha, parece estar empeorando o tiene mal olor, es posible que esté infectada. Póngase en contacto con un veterinario, probablemente le recetará antibióticos orales.