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La mayoría de los cachorros no son muy exigentes en relación a la comida y le gusta consumir muchas cosas, de ración para perros a las heces de gatos. Cuando un perro pierde el apetito y empieza a perder peso, su dueño puede estar preocupado. A veces, el clima muy caliente o un cambio en la comida puede causar falta de apetito, especialmente si el perro es sensible a la alimentación. Otras veces, una enfermedad puede ser la causa de la anorexia canina. Si un perro no comer por más de 24 horas, es aconsejable consultar a un veterinario cuanto antes.
estrés
El estrés a menudo resulta en la pérdida del apetito, especialmente si el perro es sensible. Una modificación en el ambiente, como un cambio de casa o la muerte de un miembro de la familia, puede hacer que el animal deje de comer y pierda peso, explica la veterinaria Etienne Cote en el sitio Pet Place. Para un perro propenso al estrés, haga la vida tan estable y libre de cambios como sea posible. Los perros disfrutan de rutina, entonces, estableciendo y siguiendo una rutina diaria, su perro tendrá menos probabilidades de estar estresado.
Problemas orales
Los problemas como la gingivitis y las enfermedades dentales hacen que la masticación sea dolorosa para el perro, resultando en pérdida del apetito, dice Cote en el Pet Place. Si el problema no se trata, el perro pierde peso. Un objeto extraño, como una planta, atrapado en la boca también puede hacer la masticación dolorosa, explica Cote.
Trastornos gastrointestinales
De acuerdo con los veterinarios en el sitio web de Vet Info, la inflamación de los órganos gastrointestinales, como el esófago, el estómago o el intestino, puede causar anorexia porque el comer provoca molestias o náuseas. La inflamación también puede restringir el espacio en el estómago del perro. Als causas de disturbios gastrointestinales incluyen parásitos, parvovirus, coronavirus, infecciones causadas por bacterias o hongos, úlceras, alergias alimentarias y ciertos tipos de cáncer, explica Cote.
Trastornos metabólicos
Una enfermedad metabólica puede afectar el ritmo en que su perro digiere los alimentos, haciendo que coma menos. Los ejemplos de disturbios metabólicos en perros que causan disminución del apetito y pérdida de peso incluyen condiciones como la diabetes mellitus y la enfermedad de Addison, de acuerdo con el sitio Pet Education. Los síntomas de la diabetes mellitus incluyen anorexia, sed extrema y orina frecuente. Los perros con la enfermedad de Addison presentan síntomas como letargo, pérdida del apetito, vómitos y debilidad muscular.
Trastornos del hígado
La función del hígado es filtrar las impurezas del cuerpo. Si el hígado no está funcionando correctamente, la presencia de impurezas puede afectar el cerebro y reducir el hambre del perro, según Cote. Los trastornos del hígado que pueden causar anorexia y pérdida de peso en perros incluyen hepatitis crónica, cirrosis hepática y desviación portosistémica. Otra posibilidad es la neoplasia, que es un tumor en el hígado. La neoplasia causa dolor e inflamación, haciendo que el perro tenga dificultades para comer. Las señales de disturbios en el hígado, además de la anorexia, son salivación, vómitos, letargo y morosidad.