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La espondilosa canina, o espondilosa deformante, es la formación de esporas óseas a lo largo de la columna del animal o, en algunos casos, en áreas específicas de la espina. Los veterinarios sospechan que esta condición es hereditaria.
Razas afectadas por la espondilosa canina
Todas las razas caninas corren el riesgo de desarrollar la espondilosa; para algunas de ellas, la enfermedad puede ocurrir entre los nueve meses y los seis años de edad. La raza más comúnmente afectada por ella es el pastor alemán.
síntomas
Pérdida de equilibrio, debilidad, dolor e incontinencia urinaria son algunos de los síntomas de la espondilosa canina. Estos síntomas generalmente afectan a las articulaciones de los perros, principalmente en las piernas.
diagnóstico
Cuando se determine el diagnóstico de la espondilosa canina, el veterinario buscará por deficiencias en las piernas traseras del perro. Se necesitará realizar exámenes de laboratorio, además de una radiografía, antes de presentar un diagnóstico final, debido al error común de diagnosticar la enfermedad como la osteoartritis.
tratamiento
Los veterinarios suelen prescribir medicamentos antiinflamatorios no esteroides para el dolor cuando tratan animales con la espondilosa canina. Algunos necesitan pasar una cirugía para quitar los esporones óseos que resultan de la condición.
pronóstico
Los perros con esta enfermedad pueden vivir satisfactoriamente. Sin embargo, el dolor y la incomodidad al correr, jugar y pasear pueden ocurrir. La espondilosa canina puede ser propagada conforme el animal envejece, pero, con tratamiento y visitas regulares al veterinario, él podrá vivir con menos dolor.